lunes, 30 de noviembre de 2020

REDACTORES Y CIUDADANOS, ACCIONISTAS

 

Un bout du monde. Desde Francia soplan vientos innovadores para la comunicación periodística. Con tal de recuperar credibilidad y lectores, en plena controversia sobre el cambio de modelo de negocio, hay que prestar atención a la iniciativa promovida por el periódico Le Monde, consistente en que los redactores de un medio de comunicación y los ciudadanos formen parte del accionariado, se integren y participen en su gobernanza del medio hasta contribuir progresivamente a los objetivos de superar el ambiente de desconfianza y dudas que lo pueda caracterizar.

Un bout du monde, traducido como parte, lado o fin del mundo, es el título del proyecto concebido por Julia Cagé, una profesora de Economía, especialista en financiación de medios y autora de un libro muy leído, Salvar los medios de comunicación, que es, además, la presidente de la Sociedad de Lectores del prestigioso diario Le Monde. Cagé se lanza sin reservas hacia el objetivo: “La reconquista democrática de los medios de comunicación y restaurar la confianza de los ciudadanos en ellos”.

Se pretende que la idea no sea exclusiva de Le Monde sino que se extienda a otros ámbitos mediáticos. Y es que el modelo de Cagé, esa Sociedad de Lectores creada para favorecer o impulsar la democratización del periódico, parece agotado o necesita de una revitalización. En su día gozó de gran influencia entre los accionistas mayoritarios, llegó a tener poder de veto, pero ahora se quiere dar un paso más allá, aunque inicialmente se admite que la entrada de nuevos accionistas asociados es muy complicada dada la personalidad jurídica de la que se dotó en su día la Sociedad.

De momento, ya han lanzado una campaña de crowdfunding o micromecenazgo, en castellano, esto es, una red de financiación colectiva, normalmente online, por medio de donaciones económicas o de otro tipo, que sirven para financiar un determinado proyecto a cambio de recompensas, participaciones de forma altruista.

Bout du Monde, la nueva asociación sin fines de lucro en la que cada miembro tiene un voto en una junta general a partir de una donación de cinco euros, “está diseñada para brindar esta garantía democrática.”

Para su primera campaña de recaudación de fondos, se ha fijado un objetivo de 150.000 euros. Según la profesora Cagé. “la idea es tener una herramienta que pueda insertarse en el contexto de grandes grupos de prensa como el Grupo Le Monde y situar a los lectores, ciudadanos y periodistas en el corazón de la gobernanza de los medios”.

Y explicita, según recoge Laboratorio de Periodismo, de la Fundación Luca de Tena, las tres grandes metas de la iniciativa:

-Permitir gracias a las campañas de crowdfunding, el ingreso de periodistas y ciudadanos al capital de los medios de información mediante la adquisición de acciones o participaciones.

-Ofrecer apoyo operativo y financiero a periodistas y empleados que tratan de organizar su entrada en el capital de sus medios.

-Movilizar en torno a iniciativas lideradas por el personal editorial para proteger su independencia: foros, peticiones, apelaciones a las autoridades públicas, campañas de concienciación…

El desafío ya está lanzado. Un bout du monde aspira a medios democráticos, más participativos, un cauce para recuperar credibilidad y confianza en el que caben todos, redactores, lectores y ciudadanos en genera. Interesante. A ver qué resulta.

domingo, 29 de noviembre de 2020

LA REVELACIÓN DE UNA ESCRITURA

 

Cada libro, cada volumen que ves aquí, tiene un alma. El alma de la persona que lo escribió y de aquellos que lo leyeron, vivieron y soñaron con él. Cada vez que un libro cambia de manos, cada vez que alguien baja sus ojos a las páginas, su espíritu crece y se fortalece”.Son palabras del escritor español Carlos Ruiz Zafón en ‘La sombra del viento’ para referirse a la inmensidad de los libros y lo apasionados que son los escritores cuando dan vida a sus relatos.


Tenemos la intuición de que Andrea Abreu, la autora de ‘Panza de burro’ (Barrett 2020), las interpretaría al pie de la letra a tenor de lo que ha ocurrido con su primera novela y el singular éxito cosechado. El alma de esta icodense que esta noche va a recibir el tributo de su pueblo en forma de “Cepa de honor”, el galardón instituido por el Centro de Iniciativas y Turismo de la localidad, bulle con la certeza de sentirse respaldada pues cientos, miles de lectores, han bajado sus ojos a las páginas de su primera novela, una rareza en el mejor sentido de la palabra, pero un éxito editorial indiscutible, un fenómeno de las letras canarias más recientes.


Hoy siente el calor de su pueblo que tan bien sienta en invierno. ‘Panza de burro’, que comienza con un guiño en la mismísima portada pues Sabina Urraca se siente Editora por un día, que da título a la colección en la que está encuadrada, es, sin duda, uno de los libros del año cuyo fin anhelamos siquiera como auto de fe para que lleve todos los males que hemos padecido. Dice Urraca que “la escritura de Abreu es inteligente y salvaje, con un gran pulso poético y sin miedo. Hasta el momento había publicado el poemario Mujer sin párpados (Versátiles, 2017), el fanzine Primavera que sangra (2017, reeditado en 2020 por Demipage) y algunos textos literarios en antologías. Como narradora, en 2019, ganó el accésit del XXXI Premio Ana María Matute de narrativa de mujeres con su relato ‘Los movimientos de las plantas’. Aunque Urraca, por cierto, nació en el País Vasco, comparte con la autora de esta obra una infancia que discurrió en las islas Canarias, el espacio en el que se desarrolla la historia.


Estamos, pues, ante una mujer nacida para la escritura, para narrar después de imaginar, explorar y retrotraerse a su pasado, a su propia experiencia vitalista. A saber lo que nos depara su futuro, los géneros que incursionará y los personajes y los territorios por donde los hará discurrir. El porvenir, en cualquier caso, es prometedor a la vista de esta primera cosecha, tan granada, y de las cualidades que acredita.


Andrea Abreu ha hecho efectiva aquella frase tan manida en aquella España que tardaba en despertar y que multiplicaba sus ecos en los ambientes literarios y creativos: “Éxito de crítica y público”, se decía cuando no había redes sociales y cuando cada estreno, cada novedad editorial costaba –con permiso del autor de la frase- sangre, sudor y lágrimas.


A la autora le ha bastado revivir y aderezar su infancia y adolescencia, plasmar los ambientes de su barrio y de su entorno para dar forma a una novela de la que gusta hasta el lenguaje empleado, aquellas expresiones –si quiere poco academicistas- que, por ser inherentes al pueblo y al costumbrismo, terminan siendo aceptadas porque encajan y porque hacen más comprensible la historia de Shit e Isora, las protagonistas de la obra. Igual hasta despejan la bruma.


La crítica, salvo algunos sectores seguramente asombrados o en fuera de juego por la temática escogida y su afán rompedor, ha coincidido en señalar que ‘Panza de burro’ va más allá de ciertos convencionalismos. Se trata, como hemos leído, de una novela original, diferente y con voz propia. Lo más singular es la manera en la que Abreu traslada la oralidad a la escritura, sirviéndose de palabras y expresiones locales y rompiendo hasta con las normas ortográficas. Pero ‘Panza de burro’ es mucho más. Es una obra extraña, natural, sucia, divertida, oscura, triste, incómoda... Todo cabe en esta historia que comienza explotándote la cabeza y termina pellizcándote el alma.


El orotavense Nicolás Dorta, otro de los grandes nombres de esta nueva e ilusionante ola de las letras canarias, tan marcada por la juventud de quienes se han subido a ella por méritos propios, confiesa que, al enhebrar una interpretación del libro de Andrea Abreu, ha querido ”Escribir como hablo, como pronuncio, sin diferencias entre la palabra dicha y la que veo en la pantalla, pero no me sale, porque eso solo lo pueden hacer los que escriben construsión, güerta, pollaboba, fortasé, sangüi, cagalera, trompada, cachorrona, chafalmeja o hiperdino, sin que su literatura pierda un ápice de fuerza, belleza y verdad. Abreu escribe sin papel transparente, sin forro, encadenando frases y expresiones, hilvanando una historia que esconde una trama oculta, paralela, al acecho, como el vulcán.


Sostiene Dorta que “la artífice de ‘Panza de burro’ hace del feísmo canario un recurso poético que se traslada al lenguaje, con la cautela de no caer en excesos que podrían desmerecer el texto”. Nos parece que sublima con exactitud los valores literarios descriptivos de nuestros rasgos, de nuestra personalidad y de la condición humana del insular, con permiso de Pérez Minik, que el CIT icodense ha querido distinguir con el galardón que le entrega esta noche.


Otra escritora tinerfeña, premio Canarias de Literatura, Cecilia Domínguez Luis, le da la bienvenida y subraya que “Memoria y lenguaje son los pilares sobre los que Andrea Abreu construye su novela”, en la que su autora, añade, “vuelca sus arraigos y desarraigos”, allí donde se concatenan [un pueblo] “de calles empinadas de huertas, cuevas y barrancos, con el mar a lo lejos, invitador”. En efecto, tal como escribe Domínguez, la obra es también la historia de un pueblo, con sus prejuicios y su intolerancia, con su maledicencia, pero también con su solidaridad en momentos difíciles.


La novela, por lo que se ve, no ha dejado indiferentes a sus lectores y a sus críticos. Los testimonios seleccionados son una prueba clara, a la que añadimos el de Naima Pérez, cuando revela “quizá no sea la historia en sí, sino la forma en que está contada” , lo que ha reclamado su atención. “Una –escribe Naima-, que siempre ha sido bastante defensora de la norma ortográfica y hasta del academicismo a ultranza, se ha quedado con la boca abierta al comprobar en esa ‘Panza de burro’ cómo Andrea Abreu usa el lenguaje escrito con una inmensa carga de oralidad −a veces hasta excesiva−, pero con la que es capaz de transmitir a la perfección el significado y el sentido de lo que habría dicho si se hubiera ceñido a esa norma. Norma que, por cierto, conoce a la perfección, pero que se permite eludir para arrojar mayor autenticidad a su relato”.


No estamos, pues, ante una promesa de la escritura sino ante una autora a la que quedan, eso sí, muchos obstáculos que saltar y muchas páginas brillantes por escribir.


Para eso se lleva el ánimo de los suyos y la “Cepa de honor” que simboliza la calidad distintiva del topónimo de localidad y de uno de sus productos naturales por excelencia, precisamente en vísperas de una apertura de bodegas que, en esta ocasión, no está cargada de ruido de tablas ni de cacharros que se deslizan por otras empinadas cuestas, pero sí de aprecio e identificación de los lugareños que encuentran en las páginas de ‘Panza de burro’ la gratificante esencia de una escritura cautivadora que ojalá se prolongue con el mismo éxito que ‘Panza de burro’. Recordemos el aserto de Ruiz Zafón: “El espíritu crece y se fortalece”.


Y brindaremos por ti, Andrea, ¡Enhorabuena!

(Texto leído anoche durante el acto de entrega del galardón 'Cepa de honor' del CIT de Icod de los Vinos a la escritora Andrea Abreu, autora de 'Panza de burro')



sábado, 28 de noviembre de 2020

OPORTUNIDADES

 

El director general de Turespaña, Miguel Sanz, ha dicho en Sevilla, escenario de la cumbre Tourism Innovation Summit (TIS), que la marca España “debe escuchar más a los visitantes para detectar los cambios que se produzcan en la percepción de la marca, y mejorar la comunicación para reforzar el mensaje de que atendemos sus actuales necesidades, siendo más transparentes”.

Estima Sanz que, entre las enseñanzas y las consecuencias de la pandemia, hay que aprovechar las oportunidades que van surgiendo, aunque tarden en madurar. Si considera que la demanda va a favorecer, por ejemplo, los destinos de interior, donde también late la marca España, cabe colegir que hay que acentuar los destinos diferenciados. Y para eso es indispensable cualificar la competitividad a base de ofrecer respuestas eficaces y atractivas que los clientes sabrán valorar. Así ocurre, por ejemplo, con el descubrimiento de las ciudades de mediano tamaño y los destinos rurales. En los territorios insulares se trata de volver a disfrutar o redescubrir sus encantos, eso sí, ofertándolos con imaginación y con reclamos sugerentes.

Posiblemente, Canarias, si se preserva la seguridad y se afronta con valentía un ciclo que, como indicamos ayer, requiere de innovación, de identificación a rajatabla con la sostenibilidad y de afrontar sin reservas la digitalización en el sector, tiene ante sí la gran ocasión de dar un salto en su oferta y de prestar unos servicios que incrementen el interés y las ganas de los posibles viajeros.

Hay quien piensa en los precios, como el balear Abel Matutes que, en esta cumbre de la capital andaluza, no ha dudado en promocionar su isla, Ibiza, destino diferenciado “que no tendrá que bajar tanto los precios ya que su perfil de cliente está ‘desesperado’ por disfrutar de su oferta de ocio”.

Atentos también a lo que vaticina el presidente del Grupo Hotusa, Amancio López, quien cree que la oportunidad se da también “para transformar destinos maduros en lugares más eficientes, aunque para ello se necesiten planes y recursos tanto públicos como privados”.

Se supone que tras la pandemia habrá un nuevo perfil de cliente. Hay que irlo cuidándolo y mimándolo porque es seguro que la competencia en los mercados será feroz. El esfuerzo de los empresarios y de las instituciones públicas ha de orientarse en ganar credibilidad a base de pruebas y hechos fehacientes. No bastará el voluntarismo pues se adivinan otras exigencias. Las políticas de precios, el reposicionamiento de marcas y la calidad de los servicios que se presten será factores sobre los que pivote el funcionamiento futuro del sector.

Y la credibilidad se gana con hechos. No olvidemos, por cierto, que en esos engranajes que se avecinan hay que incluir el segmento del turismo local, adaptándolo a tales exigencias. Es determinante la proximidad y el interés por descubrir destinos vacacionales que están a su alcance. Ese segmento que se ha movido y ha sido cliente de salvación durante este período de zozobra ha resuelto, al menos parcialmente, la papeleta de pequeñas y medianas empresas de alojamiento y comerciales. Si en su día escribimos que no había que menospreciar, primero al turista joven o estudiantil, y luego a los mayores que, con ayudas o incentivos, por fin podrían sentirse turistas de verdad, ahora, cuando hay que empezar a andar un nuevo trayecto o redescubrir algunas sendas, habrá que tener en cuenta a ese ‘turista local’ capaz de moverse entre islas.

¿Recuerdan Canario conoce tu tierra? Pues eso.




viernes, 27 de noviembre de 2020

SOSTENIBILIDAD Y DIGITALIZACIÓN

 

Cumbre turística en Sevilla, la Tourism Innovattion Summit 2020 (TIS), un foro internacional que debate las estrategias de reactivación del sector, y en el que se vienen diciendo cosas interesantes sobre el turismo. Que haya notable convergencia entre los expertos asistentes para dudar de cuándo empezará la recuperación de la industria turística, por ejemplo, es un hecho llamativo. Que hay que seguir avanzando hacia un modelo más sostenible y digital, otra coincidencia que hay que llevar a la práctica. Que el impacto de la crisis sanitaria ha sido determinante, básico para los perfiles del turismo del futuro. Que los procesos deben estar orientados a la mejora de la experiencia para el visitante y a la gestión activa de los espacios con corredores seguros, otro marco para trabajar con denuedo pensando en la feroz competencia que se desata en los mercados. Que la sostenibilidad de los destinos es primordial y que las pequeñas y medianas empresas deben aprobar la asignatura de la digitalización, son otras estimaciones que es indispensable madurar.

Cambios en la sociedad de nuestros días y en el propio sector turístico. Los convencionalismos de la etapa pre-COVID 19 están casi liquidados. De ello deben ser conscientes empresarios y empleados que han de construir juntos una nueva relación y aplicarse en las exigencias de ese futuro. Está muy manida la idea de que hay por delante unos cuantos desafíos pero es completamente cierta cuando todo da a entender que se abre un nuevo ciclo para el que no son válidos algunos esquemas y hábitos desgastados. Tengamos claro que el turismo va a a ser muy competitivo y eso significa que no valdrá descansar responsabilidades en terceros ni que la institucionalidad está ahí para resolver las penurias y los déficit.

Entre los testimonios de Sevilla, figura, por ejemplo, el de Fernando Valdés, secretario de Estado de Turismo, quien destaca las oportunidades que, teóricamente, se abren con la llegada de los fondos de recuperación europeos, aptos para impulsar la modernización del sector, precisamente en los campos anteriormente aludidos: sostenibilidad y digitalización. Sostiene Valdés que España mantiene niveles de competitividad muy estimables “porque la crisis ha afectado por igual a todos los países y destinos turísticos”. Y habla, sin lanzar campanas al vuelo del optimismo, de que nuestro país encabeza una posición ambiciosa en la comunidad internacional “para que la política de los test before travel (antes de viajar), se extienda y permita recuperar cierta movilidad en los flujos turísticos”.

Otra apreciación llamativa en la capital andaluza es la del consejero delegado de CaixaBank, Gonzalo Cortázar, quien asegura que hay luz al final del túnel y pondera el papel del turismo y su incidencia en el Producto Interior Bruto (PIB) de varios países. Por eso, va más lejos: “En lugar de esperar al verano hasta que la mayoría de las personas se vacunen y se recupere la confianza, debemos acelerar la acción en el sector para organizarnos operativamente y establecer corredores seguros”.

Los cambios en algunos productos turísticos son también objeto de estudio. Se pone como ejemplo el de la transformación del ‘aparthotel’ de toda la vida, modificando una parte del hotel en un espacio con habitaciones mayores donde darán servicio de personas que teletrabajan y que lo necesitan, pongamos por caso, una semana al mes.

O sea, que hay opciones y oportunidades. Todo es cuestión de iniciativa y de emprender. Ir en busca de propuestas imaginativas y factibles, explorar alternativas que eran impensables antes de la pandemia pero que ahora son necesarias para dinamizar el sector.


jueves, 26 de noviembre de 2020

"¿Y USTED CÓMO SE LLAMA? ¡MARADONA!"

 

-¿Y cómo es míster?

La primera referencia que tuvimos de Diego Armando Maradona fue de Olimpio Romero, quien fuera entrenador del Tenerife –en aquella época, ayudante de Manolo Sanchís- de Puerto Cruz, Toscal, Tenisca, Lanzarote y otros equipos canarios. Olimpio se había ido a Argentina, con el presidente López Gómez, a ver el Mundial del 78, a buscar jugadores, a sondear el mercado.

Estamos en Radio Popular de Tenerife, haciendo el inolvidable ‘Radio Deportes’, a las dos y media de la tarde. A su regreso, Olimpio cuenta su experiencia. Al final, el director técnico argentino, César Luis Menotti, había dejado fuera a Maradona, entonces con 17 años. Pero su figura ya emergía. Olimpio Romero dejó entrever entonces sus apreciaciones sobre el que había de ser, años después, genio del fútbol mundial.

-¿Y cómo es míster?

Recordamos, a grandes rasgos, su respuesta. Le había visto en entrenos y algún amistoso. Sobresalía, pese a ser juvenil. Más o menos literal:

Es rapídísimo conduciendo la pelota. Una zurda que maneja con facilidad pasmosa. Solo entiende el fútbol vertical. Regate y desborde, lo tiene todo para desequilibrar. Un poco tragón. ¡Le hacen más faltas!...”.

Romero recomendó a López Gómez que le fichara, aunque el club no pudiera incorporar extranjeros. “Pague veinte o treinta millones (pesetas), que luego lo venderá en más, seguro”, echó el resto Romero con tal de persuadir a su presidente. Aquella descripción del técnico era un anticipo de un estilo singular que admiraríamos sin reservas, que se paseó por España e Italia, hasta volver a nuestro país, antes de regresar a Argentina.

Precisamente, en enero de 1993, jugando con el Sevilla, visitó el Heliodoro. Presenciamos aquel encuentro, al que también acudió Jerónimo Saavedra, presidente del Gobierno de Canarias. Bilardo entrenaba al equipo hispalense, en el que jugaba Simeone. Y en el Tenerife, dirigido por Valdano y Cappa, ya brillaba Fernando Redondo, junto a Dertycia, Castillo y Pizzi. Había mucho de argentinismo en aquel duelo al que los medios españoles dedicaron especial atención. Recaudación récord (unos cincuenta y cinco millones de pesetas), bronca en la cancha, muchas tarjetas, una de ellas para Maradona que, en medio de un pique clásico argentino, reclamaba insistentemente una falta de Redondo. Subió la tensión hasta que el árbitro terminó expulsando al jugador del Sevilla que abandonó la cancha en medio de un auténtico escándalo.

Otro tipo de escándalo le acompañó dentro y fuera las canchas a Diego Armando Maradona, fallecido ayer en Buenos Aires. Una verdadera conmoción social y mediática. La dimensión universal del astro argentino ha estado más que contrastada. Brilló allí donde pudo lucir sus virtudes. Que no eran pocas. Fue el futbolista arquetipo del individualismo; al que se le consentía todo, por cierto. Y el individualista es genial, espontáneo. Cuando controlaba o se desmarcaba, podía hacerse una pregunta que terminó enquistándose: ¿a ver qué inventa? En una ocasión, hasta la mano de Dios.

Claro que hay una parte oscura de su desempeño: la camorra napolitana le captó. La tentación fue superior y la FIFA terminó sancionándole, cuando la analítica detecto efedrina. No era el mejor ejemplo para los jóvenes, para los profesionales del balón, aunque en su país le siguieran adorando, le elevaran a la categoría de mito. Intentó refugiarse en las trinchera ideológicas para recuperarse. Tuvo ayudas pero Diego ya se había perdido para la causa. Su aspecto físico de los últimos años dejó mucho que desear. Algunos episodios de los que constan imágenes ponen de manifiesto su deterioro físico.

Hay quien que se queda con la mejor versión futbolística, la que provocó aquella petición del relator Víctor Hugo Morales, cuando lloró narrando aquel espectacular gol a Inglaterra en México. “Ta-ta-ta… Barrilete cósmico, de qué planeta viniste...Gracias Dios por permitirme contarlo”, registró Víctor Hugo.

Otro uruguayo ilustre, el escritor Eduardo Galeano, le definió como “acorralado por la gloria”, en su obra El fútbol, a sol y sombra. Estaba agobiado por el peso de su propio personaje. “Necesito que me necesiten”, fue otra de sus frases, la que aportaba como un regate más de su repertorio.

Y nosotros fuimos testigos de esa dimensión universal cuando en la isla asistimos, hace una década más o menos, al interrogatorio de identificación de los subsaharianos que habían llegado en un cayuco. El funcionario hizo lo que con todos los internados que no disponían de papeles o documentos y preguntó:

-Usted, ¿cómo se llama?

¡Maradona!”, respondió aquel joven de color. Quién sabe si la pasión futbolera o su memoria solo conservaban aquel apellido en castellano cuando emprendió la aventura en busca de la tierra de promisión.

Dicen que fue el mejor de la historia del fútbol. Ayer lloraba su pérdida. Pero el mito pervive.


miércoles, 25 de noviembre de 2020

NUEVAS PALABRAS

 

Hablamos mucho e inventamos palabras que, con el paso del tiempo, terminan imponiéndose y son aceptadas por la Real Academia Española RAE).

La actualización 23.4 del Diccionario de la Lengua Española (DLE), presentada el pasado lunes, incorpora, en efecto, dos mil quinientas cincuenta y siete novedades, tanto enmiendas como adiciones, incluidas en la edición digital.

La crisis sanitaria, los avances en la medicina y el universo de internet son, entre otros, ámbitos de donde han sido extraídos los términos que ya son comunes y ahora pueden ser consultados lexicográficamente.

Por ejemplo, si de la pandemia o emergencia sanitaria se trata, COVID, desconfinar, distópico, coronavirus y desescalada ya son entradas del DLE. Sobre la palabra ‘coronavirus’, el DLE define desde ahora el término como un “virus que produce diversas enfermedades respiratorias en los seres humanos, desde el catarro a la neumonía o la COVID” mientras que COVID aparece como “síndrome respiratorio agudo producido por un coronavirus”. También se ha añadido desconfinamiento para definir el “levantar las medidas de confinamiento impuestas a una población, o a parte de ella, en un territorio u otro lugar”. Y desescalada se define como el descenso o disminución graduales en la extensión, intensidad o magnitud de una situación crítica, o de las medidas para combatirla.

La nueva actualización ha supuesto la entrada al diccionario de voces relacionadas con el mundo de la gastronomía como faláfel o nacho. También de la medicina, con la adición de antirretroviral, melatonina o vigorexia. Y la incorporación de voces surgidas en el ámbito digital, como emoji, trol, trolear y avatar. En cuanto a las adiciones de acepción, se define la palabra hilo como «En foros de internet o redes sociales, cadena de mensajes publicados sobre un mismo asunto». Hay otras incorporaciones al diccionario como emoticono, finde, fascistoide, animalismo, macho alfa, nacho o gastrobar.

El director de la RAE, Santiago Muñoz Machado, ha explicado el “severo” procedimiento que se lleva a cabo para añadir vocablos. Cualquier ciudadano o académico propone una modificación, se verifica que se usa intensamente sobre los corpus de la RAE y que se usa en la práctica totalidad del mundo hispanohablante. Entonces pasa a una de las comisiones del pleno, se manda a cada una de las veintidós academias y así ese año pasan al diccionario.

No le incomoda al español, una lengua mestiza, la incorporación de palabras en ’crudo”, ha dicho el director de la RAE en referencia a los anglicismos en materia de internet. Lo de “el inglés nos invade no es una cuestión de gran preocupación, las palabras se castellanizan y no significan mucho en la inmensidad del léxico castellano”, ha indicado Muñoz Machado. Desde 1726, la Academia revisa continuamente su Diccionario, que cuenta con cerca de cien mil entradas, más de dos mil quinientas novedades introducidas este año, la mitad son adiciones de nuevos términos y el resto son enmiendas, es decir términos que han sido corregidos como ocurre por ejemplo con ‘marmitako’, que antes solo figuraba como ‘marmitaco’ en el Diccionario.

martes, 24 de noviembre de 2020

PRIMEROS PASOS

 

Desde ayer los primeros viajeros que llegan a territorio español tienen la obligación de presentar la prueba PCR negativa realizada setenta y dos horas antes. Los aeropuertos españoles también están preparados para efectuar test de antígenos de COVID-19 a aquellos que no la tengan y que, como se ha informado, se exponen a una sanción. Este requisito se suma a los controles que para contener la pandemia de coronavirus se llevan a cabo en todos los pasajeros internacionales en los puntos de entrada. Así, se mantiene el control de temperatura, el control visual y el control documental (el formulario de control sanitario), según la normativa establecida por el Ministerio de Sanidad. Las autoridades sanitarias esperan que la mayoría de personas que lleguen a España traigan su PCR hecha, ya que se ha informado ampliamente de la necesidad de cumplir este requisito para entrar en el país.

Bueno, todo indica que se dan los primeros pasos en un proceso aún muy incierto de reactivación del sector turístico. Sigamos atentos a la aplicación de estas medidas básicas para la seguridad y que deben servir para compatibilizar ese principio de salud con el de la productividad laboral y económica.

Es decisivo, por tanto, cumplir con las indicaciones para que el engranaje funcione. Son las exigencias de un tiempo nuevo en el que, a la espera de soluciones estables y confiables, marcarán un desempeño distinto al que hasta ahora hemos conocido. Canarias ya conoce lo que son las carencias básicas de su principal sector productivo: no hay turistas, no hay negocio. Ha sufrido más de un semestre de aeropuertos y puertos con apenas actividad, de establecimientos vacíos y de evidentes limitaciones en casi todos los campos.

El objetivo debe seguir siendo constituir un destino diferenciado, con una oferta propia y diversa, al alcance de la clase media europea. Llama la atención que en una encuesta realizada por la firma especializada, holidayguru.es, cuando se pregunta a los turistas por la imposición a cualquier viajero por parte del Gobierno de Canarias de presentar, o bien un test de antígenos o una prueba PCR con resultado negativo, un 53 % considera que igualmente viajarían al archipiélago, frente al 47% restante que decidirán no hacerlo al tener que presentar dicha prueba.

Es cierto que la la Confederación Española de Agencias de Viajes (CEAV) ha solicitado al Gobierno que los test de antígenos (prueba más rápida y más barata que la PCR), sean incluidos como prueba válida para los viajeros que deseen hacer una estancia en nuestro país. Y otra entidad, la Asociación de Viajes Emisoras de Producto Propio (Locos por viajar, su marca comercial) ha advertido que las nuevas regulaciones pueden lastrar el sector, pensando en la obligatoriedad para los ciudadanos españoles de realizar una prueba PCR al regreso de sus desplazamientos al extranjero, pero también deben ser conscientes de lo que está en juego y de la necesidad de hacer todos los esfuerzos posibles para no incurrir en nuevos riesgos y nuevos rebrotes.

Hay que prevenir y hay que ajustarse. Es mucho lo que está en juego.



lunes, 23 de noviembre de 2020

CINE Y DEONTOLOGÍA EN EL PERIODISMO DEPORTIVO

 

Dos profesores investigadores de la Universidad Complutense de Madrid, Francisco Javier Montero y María del Mar López-Talavera, han publicado en la revista Estudios sobre el mensaje periodístico, las conclusiones de un trabajo que, desde luego, llama la atención y que interesará a los estudiantes de periodismo, especialmente a los que se orientan hacia la especialización deportiva.

Estiman los autores que el aprendizaje de los conceptos fundamentales de la ética entre estudiantes de facultades y centros de enseñanza se ve favorecido a partir de películas o series sobre deporte y sobre el ejercicio profesional en este campo informativo especializado. La tesis sugiere integrar la ficción audiovisual en los métodos de enseñanza en el aula, de modo que se contraste que la proyección de filmaciones complemente la explicación teórica.

En aquella célebre serie televisiva, Lou Grant, emitida por RTVE hace cuarenta años, producida por la CBS y protagonizada por Edward Asner, ya se planteó algo de esto en un par de episodios. El singular y frenético ambiente en las interioridades de aquel periódico, Los Angeles Tribune, generó el interés de muchos jóvenes que se acercaron a las facultades y se interesaron por las entretelas de la profesión.

Los profesores Montero y López-Talavera exponen hasta cincuenta y seis ejemplos de consideraciones éticas para explicar la conducta profesional de periodistas, apoyándose en veinticuatro películas y dos series. En concreto, según se lee en periodismodeportivodecalidad.blogspot.com, el análisis crítico de esas obras ilustran casi una veintena de principios éticos del periodismo. Son los siguientes:


-Responsabilidad hacia el público:

    . Veracidad de la información.

· Claridad de la información

    . Defensa de los derechos públicos

    . Responsabilidad como creadores de opinión pública

- Responsabilidad hacia fuentes y referentes:

    . Recopilación y presentación de información de manera justa

    . Protección de fuentes y referentes

- Responsabilidad hacia el Estado:

    . Respeto a las instituciones del Estado

- Responsabilidad hacia la empresa:

    . Lealtad a la empresa

- Protección de la integridad profesional de los periodistas:

    . Derechos y obligaciones para la protección de la integridad

    . Protección frente a poderes públicos

    . Protección frente a empresa y anunciantes y

- Protección de la unidad de la profesión:

    . Protección de estatus de la profesión

    . Solidaridad profesional


Algunos de los títulos de esa filmaciones son muy conocidos: Once pares de botas (1954, de Francisco Rovira Beleta), Escuela de periodismo (1956, de Jesús Pacual), Más dura será la caída (1956, de Mark Robson), El complot de los anillos (1988, de Francescv Bellmunt), Un domingo cualquiera (1999, de Oliver Stone), El partido de sus vidas (2005, David Anspaugh) y El ídolo (2015, de Stephen Frears).

Los autores concluyen que “la ficción audiovisual proyecta y hace prevalecer una imagen desfavorable del periodista deportivo en la sociedad actual”. Asimismo, se reafirman en su propuesta pedagógica “de utilizar estos ejemplos con estudiantes como vía eficaz para explicar cuáles son las principales infracciones éticas que se cometen y los modelos positivos que han de emularse acordes al cumplimiento de los códigos de la profesión”.

Según los resultados de su trabajo, “casi el 61 % de los comportamientos de periodistas deportivos reflejados en estas películas y series son contrarios a la ética profesional”. Desde otro ángulo, poco más del 23 % de los casos sí están en sintonía con los códigos deontológicos, mientras que el 16 % responden a situaciones en las que se producen rectificaciones a posteriori de actos negativos”.

Hoy, cuando tanto se habla de deontología periodística, este trabajo, desde luego, es toda una invitación a profundizar en la fuente y aprovecharla.


domingo, 22 de noviembre de 2020

TURISMO, ¿UN SECTOR DOPADO?

 

En un sitio web especializado, preferente.com, plantean que el turismo se está convirtiendo en un sector dopado por rescates públicos y ayudas financieras con aval público. Es completamente cierto que muchas empresas han disparado su deuda, pese a no disponer de planes realistas que, porfiando una transformación innovadora o digitalizada. Cabe deducir que carecen de una rentabilidad a medio plazo: se avecinan procesos de fusiones empresariales, los precios –dada las circunstancias- tenderán a la baja y el mercado se va a contraer. Las inyecciones crediticias han frenado o impedido unas cuantas quiebras turísticas pero, tal como evoluciona el sector, sus efectos se agotan y el marco de incertidumbres se expansionan. En definitiva, un sector ahora mismo mantenido artificialmente.

En la información del citado medio, se cita que en España, “las empresas que más han disparado su deuda son Air Europa, Ávoris o Naviera Armas, mediante rescates con dinero de los contribuyentes o con créditos bancarios avalados por el Estado”. Y recuerdan que en el extranjero, gigantes aéreos como Air France-KLM y Lufthansa, y colosos emisores como Tui, también han recibido fuertes inyecciones públicas (su nuevo rescate en Alemania se eleva a mil ochocientos millones de euros).

Hay otros casos, como el de IAG, matriz de Iberia, y el Vueling. Sin olvidar los de Hotelbeds y Jet2, que han recibido aportaciones de liquidez de sus accionistas para incrementar su base capital. En cuanto a las grandes cadenas hoteleras, solo Hotusa ha asumido la posibilidad de tener que acogerse a un rescate público, derivada de su propio modelo de negocio: más de la mitad de sus establecimientos en España son de alquiler.

La conclusión para preferente.com es clara: “El turismo se ha convertido así en un sector dopado, con unos niveles de endeudamiento respecto a activos o beneficios nunca vistos en el caso de aerolíneas y emisores, que son precisamente los dos eslabones de la cadena con peores márgenes de rentabilidad de forma estructural”.

Como no se ha descartado que más grupos aéreos y turísticos se acojan a rescates públicos, en el sector se teme que estén germinando las empresas denominadas ‘zombis’ que, según algunas fuentes, acabarán por explotar inevitablemente cuando constaten que su modelo de negocios impide devolver los préstamos aún en el escenario más optimistas. Los peores augurios apuntan a una crisis económica de dimensiones sin precedentes. Las empresas turísticas menos potentes tendrán verdaderas dificultades en un mercado contraído tanto en la movilidad como en el alojamiento. Por el contrario, las más sólidas, según este digital especializado, aquellas que “gracias a sus mejores modelos de negocio y su menor endeudamiento han podido sobrevivir por sí mismas, afrontan un horizonte de años sin apenas rentabilidad, ya que la necesidad de liquidez de sus competidores más débiles va a hundir los precios, en un mercado además encogido”.

¿Hasta cuándo durará la situación? ¿Hasta cuándo resistirán las empresas con este ‘doping’ financiero público? En Noruega, por cierto, el gobierno de aquel país se niega a más rescates a favor de la compañía aérea Norwegian porque considera que ya es un pozo sin fondo.





sábado, 21 de noviembre de 2020

LABORATORIOS TURÍSTICOS

 

El Consejo Social de la Universidad de Las Palmas de Gran Canaria (ULPGC) promueve una iniciativa, titulada Canarias importa, consistente en diseñar un nuevo modelo de desarrollo para las islas.

El empresario y profesor asociado de dicha universidad, Eduardo William, explica que el proyecto tiene diez ejes estratégicos y que el apartado dedicado a turismo es el más importante. Se trata de desarrollar tres propuestas concretas como dinamizadoras del turismo para su diversificación en Canarias: un nuevo modelo turístico, vacaciones orientadas a la captación de los mayores y laboratorios de innovación de referencia internacional que profundizarán en la digitalización y la sostenibilidad, dos factores primordiales en el futuro del sector. Algunas entidades grancanarias ya trabajan en esta iniciativa.

Canarias, según BBVA Research, ha experimentado, entre marzo y septiembre del presente año, una disminución de entre el 18,6 y el 40,8 % del Producto Interior Bruto (PIB), lo que nos da una idea de los estragos causados por la COVID-19. En ese escenario aún plagado de incertidumbres el profesor William explica en canariasahora.com que el nuevo modelo turístico aprovecharía el liderazgo mundial del Archipiélago para orientarse hacia un sector inteligente. “Un turismo mucho más digital, mucho más conceptualizado en el ámbito humano, en el tema de la responsabilidad con el planeta”. Esta vía, reconoce, es posible “porque precisamente tenemos un mercado, un sector, una demanda y una oferta muy potente". La otra idea aspira a “romper el axioma fundamental de que el turismo se basa en el desplazamiento”, cuando a su juicio se sustenta “en la experiencia, en la inteligencia y en las emociones”. La realidad extendida y la neurociencia serían los motores en este cambio de paradigma.

Se trata, de acuerdo con estos postulados, de que los sectores público y privado vayan de la mano para avanzar hacia la consecución de ese nuevo modelo. Si importante ha de ser la aportación de las administraciones públicas no menos debe ser la respuesta del empresariado del sector, consciente de que se abre una nueva etapa en la que habrá que gestionar con conceptos y métodos muy distintos y con un peso significativo de la tecnología digital. William dice que hasta ahora hemos venido haciendo vueltas de reconocimiento pero que ha llegado la hora de hacer los deberes. Y hay muchos pendientes. Es todo un desafío para el sector y para la institucionalidad canaria. Procurar una gran marca internacional tecnológica que nos pueda poner en el gran centro de I+D+i vinculado al turismo debe ser la gran aspiración que defiende Eduardo William.

Trabajar a fondo con los mayores es otra de las líneas trazadas para fomentar la competitividad. Canarias importa consigna un proyecto piloto que englobe un hotel escuela y un laboratorio orientado al turismo de la tercera edad, como todavía es denominada por muchos. Según el profesor William, esta iniciativa permitiría la creación de una marca para la renovación de los hoteles, es decir, “que pueda haber una opción en la reconceptualización de la planta alojativa para orientarla a ‘resorts’ o a una estructura, a un ecosistema, a pequeñas ciudades de la tercera edad”.

En cuanto a los laboratorios de innovación, se muestra optimista pues en el marco del turismo inteligente hay acciones que ya se están desarrollando y solo haría falta alinearlas de manera conjunta para poner a prueba la eficacia de la implantación de aquéllos.

En fin, que algo se mueve para preparar el turismo del futuro. Un turismo que, teóricamente, viene cargado de exigencias y obligará a medidas y cambios sustanciales. La experiencia será un grado pero los propósitos de adaptación, primordiales.