jueves, 30 de noviembre de 2017

CACHARROS SIN CASTAÑAS

Por primera vez en treinta y siete años, ayer, víspera de San Andrés, fecha de tradiciones, no hubo castañas en espacios públicos del Puerto de la Cruz. Cacharros sí que hubo, con menores y escolares sobre todo, que mantuvieron vivo, al menos, el ruido característico que, en otra época, cuando había que correr delante de los guardias, y luego, cuando la cosa se modernizó pese a las restricciones de las vías peatonales, era ensordecedor. Precisamente, pensando en cultivar las tradiciones, en conocer su origen, en fomentarlas y en evitar su desaparición, en hacer buen uso del costumbrismo, se llegaron a hacer, a principios de la década, en plena vía pública, talleres y actividades específicas que, además de valor participativo, servían de animado marco de convivencia. Algunas reminiscencias, las promociones de algún establecimiento privado y los afanes en algún barrio, puede que sorteando algunas exigencias, intentaron salvar el trance.
El Puerto está acostumbrado a perder cosas, a que desaparezcan iniciativas. En este espacio de la red, hemos escrito sobre el particular. Algunas de esas pérdidas han sido dolorosas y aún hoy sirven de evocación de un tiempo pasado, acaso más emprendedor o más creativo.
La tendencia ha terminado afectando a este fruto seco de temporada que acompaña a vinos de estreno, a gofio amasado y a pescado salado. Ni había castañas ni siquiera el olor característico de sus asaderos. La gente curioseaba, reía con las ristras de latas y cacharros, con alguna exageración y con selfies. Pero faltaban las castañas. A principios de los ochenta, la celebración en plena plaza del Charco, con las viandas antedichas, era casi multitudinaria. Después, se produjo el traslado de los puntos de venta a la zona del refugio pesquero, próxima al antiguo embarcadero, ya con alternativas, desafiante al frío y con los extranjeros sin entender muy bien lo que pasaba: cacharros, ruidos, vino, paella, pinchos, mejillones... y castañas, siempre castañas.
Pero esta vez no. Una de esas polémicas a las que tan dados son los portuenses, con enfoques plurales pero casi siempre caracterizadas por los intereses particulares y los personalismos, ha primado sobre el tipismo consumidor y ha habido que saborear las castañas y el vino en otros sitios. El gobierno municipal no otorgó las autorizaciones correspondientes: muy inseguro debe andar con las concesiones administrativas, con los mercadillos al aire libre y con la ocupación de la vía pública que, al final, temiendo alguna consecuencia que complique más los antecedentes y alguna resolución judicial pendiente, no se atrevió a expedir siquiera un permiso temporal o provisional. Se echa en falta alguna explicación clara y coherente, no como lo ocurrido con la conexión de recarga para los vehículos eléctricos, ridículo donde los haya.
Vaya pueblo este, tan resignado e indolente, por un lado; tan crítico en apariencia; tan predispuesto para una controversia por otro pero escasamente comprometido a la hora de la verdad; y al final, viendo cómo se van perdiendo sus valores identitarios. Luego, con el malestar en conversaciones de plaza y esquinas, quiere arreglarlo todo. No se da cuenta de que, por fas o por nefas, se va quedando sin lo que le ha distinguido, lo que han copiado en otros sitios, sin lo que ha heredado. Porque no sabe, no puede o no quiere dar continuidad. ¿Dónde el emprendimiento, dónde las condiciones, dónde las facilidades? ¿Es tan difícil regular una fiesta popular? ¿Y luego se quiere gestionar una infraestructura marítima o una red de aparcamientos o un vivero de empresas?
A las nueve y media de la noche, los taxis volvían al costado norte, los niños se retiraban somnolientos -puede que preguntándose tanto cuento para esto- y cesaba el ruido en el pavimento o en el asfalto.
La síntesis es bien sencilla: cacharros sin castañas.
Otra pérdida más.

miércoles, 29 de noviembre de 2017

UN MILLÓN DE KILOS DE PLÁTANOS



La noticia llama la atención, claro que sí: los plataneros canarios destruyeron días pasados, por decisión de ASPROCAN, la organización agrícola que los agrupa, y con la autorización de la Consejería de Agricultura, Ganadería, Pesca y Aguas del Gobierno de Canarias, un millón de kilos de fruta.
La cosa tiene su explicación: el exceso de calor en los pasados meses de septiembre y octubre y el ya cercano puente de la primera semana de diciembre han aconsejado llevar a cabo una pica, término con el que se conoce la retirada de la futa del mercado y, por consiguiente, su destrucción. Según los datos que se han conocido, la cantidad alcanza un 10 % de la producción, es decir, alrededor de un millón de kilos de la marca de corte semanal (en total, unos diez millones), no serán comercializados.
Y es que se produce una doble circunstancia: el exceso de oferta y la voluntad de evitar la caída de precios en la península. Hay antecedentes: en noviembre de 2010 ya se registró una inutilización de parte de la producción. La paradoja es que ese período es considerado como el de mejor cotización de los precios en el continente.
Según parece, muchos agricultores se han visto algo sorprendidos por la medida, precisamente porque nos encontramos en los meses del año de mejor comportamiento comercial. Claro que también se reconoce que al haberse adelantado el proceso de maduración de la fruta que debe ser cortada, ello influye en el aumento de la cantidad reducida, parte de la cual es objeto de la citada pica. Lo normal es que, en esta época del año, la marca esté en torno a los siete millones de kilos por semana: si ahora se han alcanzado los diez, el exceso es evidente. Fuentes del sector platanero han señalado que, de mantenerse ese nivel de recolección, lo consecuente sería mantener esa pica.
Parte de la fruta que se va a destruir y no se comercializa es destinada al Banco de Alimentos para atender necesidades asistenciales y alimenticias.
Muchos consumidores se han visto sorprendidos por esta noticia, hasta el punto de que una encuesta llevada a cabo por el diario digital canariasahora.com, en la que se preguntaba si “cree necesaria la ‘pica’ de plátanos para reducir el exceso de oferta y evitar la caída de precios”, un 58 % respondió negativamente frente al 39 % que dijo ‘sí’, mientras un 2 % no supo o no contestó.
Comoquiera que sea, y entendiendo medidas supuestamente proteccionistas y competitivas de la fruta, la destrucción de un millón de kilos de plátanos, cuando tanta gente necesitada hay, es delicada. Y aunque se haya explicado bien, con razones convincentes, cuesta aceptarlo.
  

lunes, 27 de noviembre de 2017

ESTABILIDAD PRESUPUESTARIA EN ENTIDADES LOCALES

Algunos alcaldes y gobiernos locales canarios han alardeado durante las últimas semanas de haciendas saneadas o de haber liquidado por anticipado operaciones crediticias. Sobre el papel, se trata de un panorama más desahogado: los munícipes han aplicado lo dispuesto en la Ley Orgánica de Racionalización y Sostenibilidad de la Administración Local de 2013 y la Ley Orgánica de Estabilidad Presupuestaria y Sostenibilidad Financiera de 2016.
El objetivo de la estabilidad presupuestaria resultaba tan básico como primordial: es la pauta que fija que las administraciones públicas deban cerrar de forma equilibrada sus finanzas a lo largo de un período de tiempo, sea un año o en más, pudiendo registrar superávit (más ingresos que gastos) pero nunca déficit (más gastos que ingresos).
En este sentido, los datos que maneja la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) sobre el déficit público son significativos: las administraciones públicas, en su conjunto, lograban situarlo, tras los ocho primeros meses de este año, en en el 2,15 % del Producto Interior Bruto (PIB), esto es, un apreciable descenso con respecto a los valores del pasado año. Ello supuso, en un marco de reducción de déficit, que las corporaciones locales se comportaran con solvencia al producir un superávit creciente que se situó en el 0,16 % del PIB, esto es, 0,06 puntos porcentuales más que en 2016. Este incremento significó, en números absolutos, mil ochocientos setenta y cuatro millones de euros, un 60,3 % más que la cifra alcanzada en el segundo trimestre de 2016.
Más datos: la administración local cierra ejercicios con superávit desde 2012, cuando contabilizó tres mil trescientos millones de euros, un 0,32 % del PIB. En 2015, la cantidad se duplicaba hasta los seis mil ochocientos cuarenta y siete millones de euros, un 0,61 % del PIB. Sumadas las cuentas, el balance local a lo largo de estos años aportó a las cuentas del Estado un saldo positivo de casi veintiséis mil millones de euros.
Si los ciudadanos se preguntan en qué les afecta este concepto, la estabilidad presupuestaria, hay que decir que, en teoría, la misma favorece la prolongación de la bonanza económica, con lo que su repercusión en el crecimiento del PIB, en la generación de inversiones y en el empleo es mayor.
Todo da a entender, al menos con las cifras sobre la mesa, que los responsables municipales se han concienciado, han cumplido lo dispuesto en las normativas reguladoras y han gestionado mejor los recursos públicos a su alcance. Es conveniente saber si esta evolución positiva ha permitido eliminar el denominado déficit estructural que durante años se enquistó en no pocas entidades locales, consecuencia del aumento de los gastos de ese tipo, y se ha mantenido incluso en los ciclos expansivos de la economía. Los expertos señalan que tal déficit solo se suprime con reformas estructurales y ahí habría que comprobar, dada la diversidad casuística, si las entidades locales afectadas han establecido las medidas adecuadas para liberarse y despejar aún más el horizonte.
No olvidemos que, al cierre del segundo trimestre del presente año, la deuda de la Administración Local en nuestro país, se elevó a treinta y dos mil cuatrocientos doce millones de euros, casi tres mil millones menos que en el mismo período de 2016. En el conjunto de las administraciones la deuda de los ayuntamientos supone un 2,84 %. Atentos: queda por hacer y se avecinan años electorales. A ver si el despilfarro y el gasto por el gasto vuelven a alejar los objetivos de la estabilidad.

sábado, 25 de noviembre de 2017

¡VAYA CON LA RECARGA ELÉCTRICA! CINCO AÑOS DESPUÉS...


Simple curiosidad, de verdad.

El 24 de noviembre de 2017 se publica una información con este título:

El Ayuntamiento inaugura el nuevo punto de recarga para vehículos eléctricos”. Subtítulo: “Los usuarios de automóviles o motos eléctricas pordrán realizar la recarga en la plaza de estacionamiento reservada, situada en la calle Santo Domingo”. Por supuesto, foto que acompaña. Plácemes y sonrisas.

El 8 de octubre de 2012, en 'Diario de Avisos' aparecía una información titulada:

Puerto de la Cruz estrena el primer punto para recargar coches eléctricos”. Foto adjunta del concejal de la época, con la instalación en el mismo punto de la información de 2017. Que se sepa, un solo vehículo utilizó el punto de recarga.

Repasando los textos, se descubre una coincidencia, como si el tiempo no hubiera pasado, como si el mercado no hubiera experimentado ningún tipo de fluctuaciones o como si los presupuestos no hubieran sido modificados:

El coste en 2017 se ha elevado a 9.491 euros, de los que 2.600 han sido subvencionados por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), del ministerio de Industria, Energía y Turismo. El resto ha sido financiado por el Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación de Puerto de la Cruz, “teniendo en cuenta las propuestas contenidas en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS)”.

En 2012, la información de 'Diario de Avisos', después de precisar que en la iniciativa habían participado ni más ni menos que tres concejalías (Hacienda, Patrimonio y Nuevas Tecnologías; Urbanismo y Medio Ambiente y Movilidad y Transporte), detalla que el “coste es de 9.491 euros, de los cuales 2.600 serán subvencionados por el Instituto para la Diversificación y Ahorro de la Energía (IDAE), del ministerio de Industria, Energía y Turismo, (…, probablemente aquí un error de composición de texto; debía decir el resto) es del Consorcio Urbanístico para la Rehabilitación de Puerto de la Cruz, “teniendo en cuenta las propuestas contenidas en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS)”.

Simple curiosidad, ciertamente. O sea, aquí hay algo raro a la hora de informar sobre la actualización del punto de recarga. Este no debió funcionar jamás. Ahí quedó, para curiosidad de los viandantes, sobre todo. Y ahora, ha servido el mismo expediente con el mismo gasto público, si acaso, cambiando el poste. Lástima que la buena voluntad de querer reponer o hacer que funcione de verdad se haya visto emsombrecida por una extraña duplicidad, incluso presupuestaria.

Pasaron cinco años entre un hecho y otro. Será que la vida sigue igual. Bueno, cambiando de postes.

viernes, 24 de noviembre de 2017

POLICÍAS ¿RESPONSABLES?

Cuando trascienden ciertos hechos o ciertas cosas es consecuente que nos preguntemos, ¿pero en qué manos estamos? La publicación de los mensajes contenidos en un chat interno de la policía local de Madrid tiene que haber removido cimientos, no solo en el propio Ayuntamiento capitalino, sino en todos los círculos y redes de ciudadanía donde preocupan ciertas derivas que son difíciles de atajar y erradicar. Las expresiones que se han conocido revelan un radicalismo tal y un extremismo ideológico absolutamente impensable en una democracia que suponíamos iba madurando y en un cuerpo de servicio público, en donde, como en cualquier parte, gremio o colectivo profesional puede haber de todo, decentes e indecentes, honestos y deshonestos, valientes y temerosos, capaces y torpes, decididos y taimados; pero en donde algunas conductas son inasumibles y solo merecen reprobación y sanciones drásticas.
No puede ser, en efecto, que policías de proximidad, aquellos que más cercanos pueden estar, y en quienes mayor confianza se deposita para salir de un trance, se manifiesten de la forma que lo han hecho estos de Madrid, con un irrespeto mayúsculo hacia la alcaldesa, Manuela Carmena, y con soflamas y dicterios que, además de revelar rasgos de su personalidad y de sus convicciones, demuestran que ni son dignos de vestir un uniforme ni están en condiciones de cumplir con su cometido como puede esperarse.
Alabanzas a Hitler, amenazas a migrantes, revelaciones de justicieros, valoraciones adornadas de emoticonos tales como “el fascismo es alegría”, apología del nazismo, confesiones de deseos insanos, insultos a una alcaldesa legítima y constitucional... De todo esto se puede leer en el chat policial. Es para asustarse, sin exageraciones. Ni libertad de expresión ni agentes de carne y hueso: los servidores públicos no pueden andarse con esas bravatas, con ese lenguaje de matones que les degrada y deja a cero su credibilidad y con esas anacrónicas e inapropiadas proclamas.
Es consecuente que les hayan abierto expediente y que les hayan retirado la placa y las armas a quienes han hablado sin pudor de “cacería de guarros”, añorando hasta el humo de los campos de concentración. Y hasta deificando a uno de los seres más sangrientos que en el mundo han sido. Pero, ¿qué se habrán creído? No tan lejanos son los tiempos en que los cuerpos policiales tenían patente de corso. Por fortuna, aunque el costo haya sido alto, la democracia comportó cambios sustanciales en el proceder y en la mentalidad policial. Aún se recuerdan los esfuerzos de Juan José Rosón y José Barrionuevo en ese sentido.
Por eso, este episodio de la policía local de Madrid, ni puede pasar inadvertido ni puede saldarse con una sanción. Aquí sí que cabe hablar de lo que significan los impuestos de los contribuyentes para retribuir a los servidores públicos. Aquí sí que puede hablarse de responsabilidad máxima, entre quienes han acreditado no saber conducirse, por mucha privacidad que ahora se esgrima. Los policías podrán tener debilidades pero en el cumplimiento de su deber han de ser conscientes de lo que supone cualquier manifestación indebida. Los reglamentos internos son taxativos al respecto, de ahí que haya que estar atentos a la responsabilidad jurídica en la que han incurrido. Hay que cortar por lo sano. Sobre todo, por los precedentes que pueda sentar la administración de justicia, incluso en ciertos ámbitos mediáticos que tan familiares resultan a algunos.

jueves, 23 de noviembre de 2017

LA FORMACIÓN TURÍSTICA, CLAVE

Más de setenta y cinco millones de visitantes en 2016. Todo da a entender que, pese al encendido de las luces de la competencia y la inestabilidad en Catalunya, en el presente año esa cifra será superada y habrá nuevo récord. El sector turístico registró crecimientos superiores al 3 % en los últimos meses y, según distintos informes, saludados por la patronal, es uno de los que más empleo ha generado, bien es verdad que muy ligado a la estacionalidad. Los expertos aseguran que es el momento de gestionar el éxito de forma sostenible.
Por ejemplo, dedicando atención y recursos a la formación, una de las asignaturas poco atendidas, pese a que varias voces empresariales han coincidido en la necesidad de tomársela en serio no solo para cualificar la mano de obra sino para producir respuestas que correspondan con los niveles de exigencia de los clientes, cada vez más altos.
Es tarea de todos, tanto de las administraciones, universidades y del sector público como de los operadores privados y empresariado del sector. La formación atañe a todos. Los profesionales al servicio del turistas han de esmerarse: ya no basta con el voluntarismo. Por eso, son convenientes y necesarios los convenios de universidades, escuelas de turismo y centros de formación con asociaciones y entidades del sector privado para llevar a cabo programas de prácticas y estancias de formación, especialmente para los recién titulados, pero también de reciclaje y asimilación a quienes ya tienen un puesto de trabajo pero necesitan ampliar o actualizar sus conocimientos. Si es necesario insistir en que otros gremios como taxistas, conductores, oficinistas y policías, también deben mejorar su formación, se hace. La formación es clave para realzar una oferta y un producto, en definitiva, para hacer honor a las prestaciones que se demandan.
Tan solo las innovaciones tecnológicas obligan a tomar conciencia sobre esta necesidad de una formación adecuada y constante. En ese sentido, poner en marcha un sistema de becas y ayudas resulta primordial para estimular la reflexión y la participación de quienes, ya con obligaciones laborales o a punto de mejorarlas y consolidarlas, han de sentirse motivados para madurar su experiencia y su misma trayectoria profesional.
Hasta se podría pensar en nuevos y transparentes programas que las empresas, posteriormente recompensadas, pondrían en marcha con estímulos procedentes del sector público. Se trata de crear una cultura apropiada para facilitar el acceso a la formación y capacitación profesional, teniendo en cuenta las circunstancias y perfiles de las empresas y de los propios empleados.

miércoles, 22 de noviembre de 2017

LA EVASIÓN DE LEDEZMA

La evasión del ex alcalde metropolitano de Caracas, Antonio Ledezma, de su régimen de arresto domiciliario en la capital venezolana, es un episodio que acentúa la crisis de Venezuela, por muchos denuestos que emplee el presidente de la República, Nicolás Maduro, y por muchos menosprecios que dirija al Gobierno de España, pidiendo que no devuelva a quien, con un sustancioso bagaje político, anuncia que va a encabezar la oposición en el exilio.
La escapatoria de Ledezma, al cabo de unos mil días, pone de relieve que el régimen totalitario no las tiene todas consigo en cuanto a seguridad interior se refiere. El episodio –llegó a sortear el ex alcalde hasta veintinueve controles-- se suma a aquel asalto a una base militar del interior y a la huida de un oficial de aviación que, a los mandos de un helicóptero, llegó a sobrevolar la capital venezolana y lanzar un proyectil, sin que nada más se supiera. El perfil bajo con que el Gobierno procesó ambos trances refleja un interés en que no se aprecien fisuras. Pareciera, incluso, que a Ledezma le dejaron que huyera, aunque la posterior actuación de la policía política, registrando sin reservas su domicilio –como si no hubiera bastado aquella abrupta requisa que el mundo pudo ver por televisión-- dejaba de manifiesto la frustración y a la vez la incapacidad. Se supone que se les escapó ante sus narices.
En el relato del munícipe caraqueño –la experiencia de Ledezma, desde luego, da para un buen volumen-- se consigna que contó con la colaboración de militares descontentos.
A la espera de saber qué sucederá ahora con Leopoldo López Mendoza, otro líder opositor, ex alcalde de Chacao, también encarcelado por resoluciones de la justicia venezolana; y de las revelaciones que siga haciendo desde el exterior la ex Fiscal General del Ministerio Público, Luisa Ortega Díaz, habrá que estar atentos hasta dónde llega el recorrido de Ledezma, por mucho apoyo que reciba en España y por mucha proyección que se haga de su labor, ahora con otra dimensión, desde luego.
¿Será capaz Ledezma, por ejemplo, de convencer a los restos del naufragio de la oposición de que las apetencias de poder, más o menos unipersonales, solo acarrean división? Esa oposición, agrupada en torno a la Mesa de la Unidad Democrática (MUD), ha cometido muchos errores estratégicos, entre ellos el de acudir a las pasadas elecciones a gobernadores, después de haber criticado severamente las evidencias de fraude en el proceso de la Asamblea Nacional Constituyente (ANC) que dejó en el país la insólita estampa de dos cámaras legislativas de representantes del pueblo. María Corina Machado, la ingeniera y diputada que promovió el concepto de la “desobediencia cívica”, la mujer que no se arrugó ante Chávez, Cabello y el mismo Maduro, dijo con claridad nones a la participación mientras se mantuvieran las circunstancias pero no tomaron en cuenta su criterios.
Puedo ser más util a Venezuela fuera del país”, ha declarado Ledezma quien ha pedido más autocrítica y menos contradicciones a la MUD. Será difícil invertir las tornas pero los demócratas que jamás se rinden, como el ex alcalde, seguirán intentándolo. Aunque sea en medio de un proceloso mar de tribulaciones.


martes, 21 de noviembre de 2017

VIOLACIÓN DEVASTADORA

En las fechas que anteceden a la conmemoración del 25 de noviembre, Día Internacional de la Eliminación de la violencia contra la Mujer, reflexionemos nuevamente sobre su origen y evolución: es la consecuencia de la discriminación y las desigualdades de género. En nuestro país, además, las repercusiones del caso de una agresión sexual en Pamplona, están dando mucho que hablar. Como en otras ocasiones, lo peor es que se fortalece la impresión de que las soluciones -incluso las derivadas de la administración de justicia- son tardías o insuficientes. Pero ese es otro debate.

Ahora, ocupémonos de los datos del informe sobre los Progresos de la denominada Agenda 2030, elaborado por la Asamblea de Naciones Unidas (ONU). Son muy llamativos: referidos a 87 países y recolectados entre 2005 y 2016, el 19% de las mujeres de entre 15 y 49 años de edad dijeron que habían experimentado violencia física o sexual, o ambas, a manos de su pareja en los doce meses anteriores a ser preguntadas sobre este asunto. En 2012, casi la mitad de las mujeres víctimas de un homicidio intencional en todo el mundo fueron asesinadas por su pareja o un familiar, en comparación con el 6% de los varones. Además, apenas la mitad de las mujeres de entre 15 y 49 años (un 52%) que están casadas o viven en pareja, toman sus propias decisiones en materia de relaciones sexuales consentidas, usan anticonceptivos y acuden a los servicios de salud. Esa estadística se basa en datos disponibles en torno a 2012 sobre 45 países, 43 de ellos de regiones en desarrollo. Otra apreciación del Informe de la ONU: la violencia contra la mujer se exacerba en los conflictos armados. En cambio, la igualdad de género ayuda a evitar conflictos, pese a lo cual las medidas en pos de una mayor inclusión, liderazgo y protección de las mujeres en las tareas de la consolidación de la paz siguen siendo insuficientes y, en algunos lugares, incluso se han producido retrocesos en este sentido, según un reciente artículo de Onu-Mujeres, la agencia de las Naciones Unidas defensora de mujeres y niñas.

Por todo ello, la ONU ha promovido, desde 2008, la iniciativa ÚNETE para poner fin a la violencia contra la Mujer. En esta edición, se desarrolla bajo el lema “Que nadie se quede atrás: pongamos fin a la violencia contra las mujeres y las niñas”. Se quiere centrar la atención en personas marginadas y desatendidas, incluidas en la población de refugiados, migrantes, apátridas, minorías, pueblos indígenas y capas sociales afectadas por conflictos y desastres naturales.

El fenómeno es lo suficientemente grave como para que la propia ONU considere que la violencia contras las mujeres y las niñas es una de las violaciones de los derechos humanos más extendidas, persistentes y devastoras del mundo.

Hay que acabar con esa lacra.

lunes, 20 de noviembre de 2017

CONSUMOS DE DROGAS LEGALES

La Unión Europea (UE) es la zona del mundo donde más se bebe, según las estadísticas de la Organización Mundial de la Salud (OMS). España está por debajo de la media europea pero los timbres de alarma han sonado en casi todos los sitios hasta el punto de haber alcanzado una notable preocupación pues en el segmento de edad de los adolescentes los consumos se han disparado como consecuencia de una mayor permisividad y tolerancia.

Partamos de la siguiente base: alcohol y tabaco en nuestro país son sustancias legales. Los datos de la OMS, por segmentos de edades (15 a 64 años), son reveladores en ese sentido: el porcentaje de consumo de alcohol (77,6 %; 9,3 % a diario) y de tabaco (40,2 %; 30,8 % a diario), es superior al de los hipnosedantes, con y sin receta (12 %; 6 % diariamente).

Y tengamos en cuenta, siempre según la misma fuente, que se mantiene estable la edad media de inicio en el consumo de estas sustancias legales: a los 16,4 años en el tabaco y a los 16,6 en el alcohol. Es cierto que otros estudios más localizados detectan edades más tempranas y acentúan la gravedad del problema, en demanda, posiblemente, de soluciones preventivas siempre difíciles de procesar y aplicar. Pero las instituciones y los operadores sociales deben seguir intentándolo, so pena de que el policonsumo -otra referencia a no perder de vista- siga incrementándose hasta incluir muy frecuentemente (el 90 %) el consumo de riesgo de alcohol y cannabis.

Así que el botellón y otros hábitos sociales siguen causando estragos, principalmente entre los jóvenes. El cumplimiento de la normativa sobre la prohibición de venta de alcohol a menores flaquea, seguro. Eso propicia que la sociedad española sea una de las más tolerantes con los consumos: desde hace años, tales consumos se identifican como una señal de libertad o de sentirse mayor. Ya es un hecho, en efecto, que beber alcohol o utilizar estupefacientes o alucinógenos resulte casi un elemento indispensable para un modelo de diversión y ocio tóxico que, a menudo, deja consecuencias negativas para la salud propia y para los entornos en que los jóvenes se desenvuelven.

Es cuestión entonces de incidir en las medidas preventivas. No basta, por lo visto, con la información dirigida a las personas consumidoras, sino que se requiere un radio de acción mucho más amplio y una mayor implicación de los agentes sociales. Más formación, más pedagogía, más recursos y más opciones para un ocio más saludable, para unos usos alejados de la toxicidad. No se trata de discursos moralistas ni de sugerencias restrictivas; sí de acabar con vicios a la larga perjudiciales y con percepciones de riesgo aparentemente bajas o inocuas.

Esa es la realidad.

sábado, 18 de noviembre de 2017

LOS TELESCOPIOS

Han pasado unos cuantos días desde que han instalado cinco telescopios en la franja litoral del Puerto de la Cruz, tres de ellos en el paseo San Telmo, aquel que iba a estar diáfano, libre de postes o similares para disfrutar del paseo y contemplar el mar y eludir los peligros para los menores que se encaraman a cualquier soporte. Nadie sabe quién los ha instalado (y si se sabe, nadie ha dicho nada), solo que cuentan con la autorización de la Demarcación de Costas, que es tanto como decir vaya ejemplo de descoordinación: el gobierno local no se entera o no es informado de que otra administración concede un permiso en su ámbito territorial. Ni explicaciones de ese gobierno ni una mísera pregunta de los grupos de oposición.
Es difícil discernir sobre qué es lo más grave de una situación cuando menos curiosa. Porque, teóricamente, negocio hay: funcionan los telescopios con monedas de uno y dos euros. Igual la iniciativa -se supone que privada-, con la bendición administrativa de Costas, quería probar, a ver si la cosa resultaba, y entonces no la publicitaron, porque ya saben que el estilo compadre es efectivo y termina consolidándose, con sus provisionalidades y tal y tal, hasta que alguien decide poner punto final.
Se hace la imaginativa descripción a título deductivo porque, lo dicho, no hay explicaciones por ahora.
Lo cierto es que los telescopios están ahí, en San Telmo y Martiánez. Recuerdan los de otra época, puede que aún en el franquismo, cuando fueron instalados en el mirador de La Paz para contemplar parte de aquella pequeña gran urbe en la que competían los valores de la tradición con la modernidad y los atractivos del desarrollo turístico. Entonces (eso fue lo que circuló), los propietarios y directores de establecimientos hoteleros protestaron porque las lentes de los telescopios iban dirigidas a balcones y habitaciones, invadían la intimidad y varios clientes se percataron y protestaron. Terminaron retirando los telescopios, claro.
Ahora, han pasado unos cuantos días y los artilugios siguen ahí, admitiendo monedas de uno y dos euros. Y hasta con una instrucción rotulada: “No enforcar al sol”, teóricamente con su errata tipográfica y todo, porque el vocablo, ya en desuso, sinifica 'ahorcar'. No creemos que la intención de los promotores -y los autorizantes, por acción u omisión- fuera la de aniquilar al astro rey, si nos permiten la licencia.
Es probable que, acto seguido, alguien pregunte y se reiniciará la cadena del proceso hasta verificar que nadie fue.
Al estilo compadre. Así nos va.

viernes, 17 de noviembre de 2017

NUEVO RETO TURÍSTICO

Cuando ya es un hecho la reaparición de destinos competidores en el Mediterráneo oriental y cuando nadie, después de la World Travel Market de Londres, oculta su pesimismo con respecto a los impactos en la industria turística una vez se consume la salida del Reino Unido de la Unión Europea (UE), prevista para marzo de 2019, se plantea un nuevo reto para el sector turístico consistente en optimizar la experiencia de los viajeros en las tres fases básicas de su itinerario: búsqueda, reserva y estancia. En la capital británica también se habló de esa cuestión a partir de las que ya son tendencias tecnológicas consolidadas referidas a la analítica de datos, la movilidad y soluciones de comercio electrónico y el pago móvil.
Una firma española, Vector ITC Group, ha adelantado un primer dictamen después del procesamiento de algunos datos que ofrece una llamativa conclusión: los clientes que tienen una experiencia de viaje satisfactoria gastan un 140 % más que los que la aprecian como deficiente. Eso significa que en los destinos turísticos receptivos deben esmerarse para que los visitantes se lleven la mejor impresión y terminen repitiendo, con el valor añadido de un gasto superior. Y no en un porcentaje bajo, precisamente. Se dirá que esto no es ninguna novedad, que ya se viene haciendo en algunos sitios desde hace años, pero entonces no existía tanta competitividad, no ha habido tantas exigencias y los avances tecnológicos no solo eran más lentos sino que tardaban en consolidarse.
Esmerarse para lograr una experiencia inolvidable hasta superar las expectativas. Este debe ser el objetivo. El estudio de Vector ITC Group incide en que el cliente satisfecho es proclive a compartir sus experiencias en la red y está predispuesto para cuestionarios y valoraciones, de modo que ello repercute en potenciales clientes que, antes de tomar una decisión y contratar un paquete turístico, consultan primero en la red y luego contrastan sus informaciones a través de amistades y recomendaciones. En la tríada aludida, búsqueda, reserva y estancia, cada fase entraña su importancia y si se quiere una solución homogénea o por un solo canal, además de ágil y segura, es primordial que la estancia resulte enteramente satisfactoria.
Los operadores turísticos deberán seguir atentamente las estrategias que, por supuesto, tendrán un soporte tecnológico avanzado para diseñar con acierto y revisar lo que proceda en la evolución correspondiente. En ese sentido, la citada compañía ya afina con aplicaciones adaptadas a las necesidades de cada cliente. Se basa en el aprovechamiento de la experiencia en el ciclo de vida del usuario turístico. Esto supone trabajar en la monitorización y gestión de la reputación en redes sociales y sistemas de evaluación hoteleros con la finalidad de captar segmentos de mercado o nuevos clientes y fidelizarlos.
En cualquier caso, el sector debe ser consciente de que las coyunturas a corto y medio plazo obligan a afrontar planteamientos como este de una forma valiente y decidida. Se podrá discutir el ritmo, ma non troppo, porque a estas alturas, quien se duerma en este negocio, ya sabe que las corrientes no se detienen y su capacidad de arrastre dejan fuera de concurso a quien sea.

jueves, 16 de noviembre de 2017

ALFREDO MEDEROS, SIEMPRE TAN PERSPICAZ



En un Comité Regional de los Socialistas Canarios, máximo órgano entre congresos, en el tono crítico que le caracterizaba, con aquella voz tan peculiar, le espetó a Jerónimo Saavedra, entonces secretario general y presidente del Gobierno de Canarias:
-Jerónimo, estás evanescente, bájate de la nube.
La expresión se contextualizaba en el tono que distinguía los debates de aquel órgano, no era alarmista y solo produjo breves aplausos y alguna que otra sonrisa. El propio Alfredo se acercaba al final a saludar a Saavedra que le devolvía el gesto:
-Tú siempre tan perspicaz, Alfredo.
Y lo era, sí. En cualquier conversación, en cualquier intercambio de criterios, en cualquier ponencia. Siempre con aquel rostro de bonachón que traslucía cercanía, atención y amabilidad. En otra ocasión, cuando era presidente del Consejo de Entidades Canarias en el Exterior (CECE), tras una audiencia con Fernando Fernández, recién elegido presidente del Gobierno de Canarias, tras despedirse, en la escalera de la antigua sede presidencial de la Plaza de los Patos, y exhibiendo la típica socarronería palmera, soltó:
-Bueno, Fernando, quedó a la espera de que me llames para convocar la primera reunión.
-No, Alfredo, llámame tú-, le replicó el presidente Fernández.
Alfredo Mederos Pérez, nacido en Breña Alta (La Palma), fallecía ayer, poniendo fin a una vida que consagró a la docencia, la investigación y la política, sin olvidar el sindicalismo. Fue la suya una trayectoria ejemplar de integridad y entrega a las causas que defendió con denuedo. Sencillo, austero, modesto, servicial… Alfredo reunía esas virtudes humanistas que le hacían aún más apreciable. Licenciado y doctor en Ciencias Químicas por la Universidad de La Laguna. Accedió por oposición a la cátedra de Química Inorgánica. Fue también Profesor Emérito y se jubiló en 2009. Es autor de más de ciento cincuenta trabajos científicos y director de numerosos proyectos de investigación españoles, europeos y latinoamericanos.
Pocas personas tan constantes en el ámbito de la política como Alfredo, quien contaba con fruición las peripecias de aquellos años universitarios en los que encabezó algunas luchas antifranquistas, como la mantenida para protestar por la expulsión de los catedráticos Enrique Tierno Galván, José Luis López Aranguren y Agustín García Calvo. Y los primeros pasos  en el Partido Socialista Popular (PSP) del que llegó a ser, en Canarias, su secretario general. Desempeñaría después un papel destacado en el proceso de fusión con el PSOE: su tolerancia y su visión integradora fueron determinantes, precisamente en las negociaciones para tal finalidad con Jerónimo Saavedra.
Se incorporó a la Unión General de Trabajadores (UGT) en 1978. Y ya de lleno en el PSOE, hizo de todo: además de secretario general de la Agrupación Socialista lagunera hasta miembro del Comité Federal y presidente de la Comisión de Ética de la organización en Canarias. Como cargo público, ejerció de consejero en el Cabildo Insular de Tenerife, entre 1979 y 1987.
Fue también decano del Colegio de Doctores y Licenciados del Distrito Universitario de La Laguna. Entre los reconocimientos recibidos, figura la Medalla de Oro al Mérito en el Trabajo otorgada por el Gobierno de España. Compartimos su emoción el día en que Jesús Caldera, ministro, le hizo entrega de la distinción. Es hijo predilecto de Breña Alta, su villa natal; y está en posesión del premio San Borondón concedido por el Centro de la Cultura Popular Canaria “por su excepcional contribución a la recuperación de la memoria histórica del pueblo canario”.
Esta tarea, en efecto, ocupó buena parte de los últimos años de su vida. Es autor de varios libros y publicaciones, fruto de su generoso quehacer en el campo de la investigación histórica. Ahí siempre le vimos animoso y entusiasta, ilusionado sin reserva cada vez que un nuevo libro iba a ver la luz.
Su contribución en todos los ámbitos reseñados hace que le consideremos como un auténtico bastión del socialismo canario.
-Siempre tan perspicaz-, que diría Saavedra.

miércoles, 15 de noviembre de 2017

MALOS TRATOS EN EL ÁMBITO FAMILIAR



Uno de cada cien niños españoles padece malos tratos en casa, según se consigna en el informe de la Asociación Española de Pediatría de Atención Primaria. Puede que el dato se quede corto pues, según esta asociación, solo trascienden entre el 10 y el 15 % de los casos. Las cifras que maneja ponen de relieve la necesidad de una ley integral de la  infancia que sirva para proteger a los menores de cualquier forma de violencia en el ámbito familiar y para desarrollar medidas que favorezcan la coordinación de los agentes implicados a quienes, de paso, conviene formar en aptitudes profesionales.
En efecto, hay datos muy llamativos: el Registro Unificado de sospecha de Maltrato Infantil recibió en 2015 un total de 13.818 notificaciones, que pueden consignar más de una tipología de maltrato. Así, las comunidades comunicaron 17.149 casos de maltrato a menores, de los que 8.726 fueron por negligencia, 4.439 emocionales, 3.297 físicos y 687 abusos sexuales. Ese mismo año fueron denunciados cerca de 4.000 casos de menores víctimas de malos tratos en el ámbito familiar, según datos del Ministerio del Interior y, desde 2013, 22 niños han sido asesinados por la violencia intrafamiliar.
La vicepresidenta primera de la Asociación, Narcisa Palomino, admite que falta mayor conciencia ante la gravedad del problema, acaso por no ser demasiado visibles las estadísticas. Eso requiere, según la presidenta, Concepción Sánchez Pino, una homogeneización de las cifras y unas mejores condiciones de accesibilidad a los registros dado que estos resultan una herramienta muy útil para la detección precoz del maltrato infantil.
Habrá que tomarse en serio este asunto, revisando aquellas imperfecciones que lo complican. El maltrato físico y psicológico, por no hablar de abusos sexuales, se convierte en una lacra preocupante que, de no atajarse o erradicar a tiempo, termina añadiéndose a los problemas sociales que deforman y alteran la convivencia. Cuando los males están extendidos, será difícil, por no decir imposible, dar con las soluciones adecuadas. Volvemos a lo de siempre: educación y civismo como soportes de la imprescindible prevención.
Los malos tratos en el ámbito intrafamiliar en nuestro país, según la Asociación, pueden empezar con descuidos o insensibilidad reflejados en formas de vestir y hasta en malnutrición. Luego pueden sobrevenir males mayores, no solo con las huellas físicas de los malos tratos sino con las consecuencias psicológicas como el recelo, la depresión y cuadros de ansiedad. Los pediatras piden que su parecer sea tenido en cuenta y están en lo cierto. Pueden ser decisivos, trabajando codo a codo con los padres y con la máxima franqueza, para reconducir una situación y evitar males mayores.