lunes, 22 de septiembre de 2025

Del voluntarismo al rango universitario

 

La cátedra de Turismo de la Universidad de La Laguna fue distinguida ayer con el Drago de Honor que concede el Centro de Iniciativas y Turismo de Icod de los Vinos (CIT), presidido por Antonio García Fleitas. El acto tuvo lugar en el Parque del Drago, con asistencia del alcalde de la localidad, Javier Sierra Jorge (Alternativa Icodense), técnico superior en Información Turística y Guía Turístico; Isabel Karely León Pérez, vicerrectora de la universidad lagunera y el mismo presidente del CIT.

Nos correspondió leer una semblanza de la cátedra galardonada, con el siguiente texto, titulado “Del voluntarismo al rango universitario”. Este fue su contenido:

Expresamos, en primer término, nuestra felicitación al titular y a los integrantes de la cátedra de Turismo de la Universidad de La Laguna que hoy, en este emblemático recinto, es distinguida con el Drago de Honor que otorga el Centro de Iniciativas y Turismo de la ciudad de Icod de los Vinos.

Esta fuente de riqueza que los canarios descubrieron mediados los años cincuenta del pasado siglo, cuando la vieja Europa se reponía de las dolorosas heridas de la Segunda Guerra Mundial y emprendía nuevos rumbos en su propia construcción hacia horizontes tecnológicos y de convivencia completamente desconocidos. De hecho, cuando empezaron a desarrollarse, se comenzó a hablar de la industria sin chimeneas, primera de las definiciones que han ido engrosando el concepto.

Quienes integran la dirección del CIT icodense, seguro que quienes han asistido a ediciones anteriores de este acto, saben con qué mimo, con qué esmero se prepara este acto, primero por la entidad o la categoría de los galardonados. Luego, por la proyección que tiene, especialmente en el universo turístico que se enriquece cuando trasciende su aportación, individual o colectiva, profesionalmente hablando.

En esta oportunidad, el Drago de Honor, obra escultórica de la que es autor el artista Javier Huerta Gómez, recae en una cátedra universitaria, un hecho que, en sí mismo, condensa los avances que durante décadas ha experimentado el sector, cada vez más científico, cada vez más tecnificado, mejor estructurado, mejor estudiado e interrelacionado y de indiscutible creciente participación en los esquemas del Producto Interior Bruto (PIB). Es algo más que un salto cualitativo y de ello debemos congratularnos. Hemos pasado de aquella industria sin chimeneas al empleo de la Inteligencia Artificial (IA) y gestiones económico-financieras avanzadas.

La institución universitaria lagunera ha sido sensible y ha desempeñado un papel activo en este desarrollo del negocio o del hecho turístico. De facto, sigue abierta y en plena proceso de colaboración con un colectivo de veteranos profesionales y empresarios del sector, agrupados en torno a la denominación ‘Calínico’ de la que hemos hablado en anteriores ediciones.

En ella y en los círculos más cercanos, se habla de la turismología, explicada en “Wikipedia” como la ciencia social que se centra en el estudio del turismo desde el punto de vista social, económico y espacial, ocupándose del fenómeno en su totalidad. El turismólogo es el profesional universitario que conoce e investiga el turismo, considerando su campo de análisis como una ciencia social en constante desarrollo metodológico y relacionada con las ciencias económicas. Las funciones de un turismólogo son planificar, gestionar, desarrollar el sector turístico y administrar la industria del turismo. Además de que una de sus ventajas es asegurarse de que su organización tenga una estrategia sostenible a largo plazo.

Un turismólogo tiene que ser un experto en turismo, debe de conocer el turismo desde un ámbito social, geográfico, económico, cultural, entre otros, y es un profesional que debe tener una visión más amplia que abarque múltiples actividades.

La turismología tuvo su aparición para que todos los componentes y fuerzas del turismo no fuesen estudiados aisladamente, sino con una visión sistemática y holística. La turismóloga uruguaya Margarita Barretto ya define esta actividad:

«La turismología es el estudio del fenómeno turístico en cuanto a hecho social (en el sentido dado a esta expresión por Émile Durkheim en el siglo XIX). El turismo es el fenómeno en sí [pero] son dos cosas diferentes: el fenómeno y el estudio del fenómeno».

En sus primeros tiempos, el geógrafo yugoslavo Zivadin Jovicic, considerado el padre de la turismología, ya había definido ésta como aquella ciencia que busca definir las distintas dimensiones espaciales, sociológicas y económicas del turismo, estudiando la correlación existente entre lo general y lo particular. El término fue popularizado cundo el mismo Jovicic fundó la revista del mismo nombre en 1972.

El consideraba que ninguna de las ciencias existentes podía realizar el estudio del turismo en toda su dimensión (ni la geografía ni la economía ni la sociología), por considerar que sus aportaciones son unilaterales. Esto permitiría la creación de una ciencia independiente, denominada así la turismología.

Según Jovicic:

"El turismo es un fenómeno único y ninguno de sus componentes puede ser estudiado aisladamente, ya que para poder estudiar aisladamente cualquier aspecto del fenómeno es indispensable conocer su esencia, su naturaleza profunda, pues, de lo contrario, se corre el riesgo de presentarlo desde un ángulo unilateral o desnaturalizado (cayendo en el economicismo, el geografismo o el sociologismo.

Turismología fue, para Jovicic y otros científicos, el nombre perfecto para nombrar a la nueva ciencia del turismo, porque es simple y acertado desde el punto de vista lingüístico.

En el año 2001, el licenciado mejicano Rafael Balseca Rendón, declara el Turismo o la Turismología como ciencia. Según su publicación ‘Turismo y ciencia’: "El turismo es una ciencia social de carácter fáctico dado por las motivaciones, desplazamientos y uso del espacio turístico por parte del homo turisticus".

En Francia, fue el profesor Jean Michel Hoerner quien en el año 2000 popularizó el término ‘tourismologie’, especialmente en sus obras:

  • "Traité de tourismologie. Pour une nouvelle science touristique".

  • "La Science du Tourisme. Précis franco-anglais de Tourismologie". (Obra coescrita junto a la profesora de la Université de Perpignan, Catjerine Sicart.


Anteriormente, el propio Hoerner había ya utilizado con frecuencia la palabra, en especial, en la revista "Espaces, tourisme & loisirs".

En junio de 2005, el profesor Hoerner publicó en el número 227 la citada revista "Encore un pas vers la tourismologie..." en donde aborda la turismología desde el punto de vista epistemológico. Claude Origet du Cluzeau, vicepresidente de la Asociación Francesa de Expertos Científicos de Turismo, es otro de los investigadores que también se ha dedicado a investigaciones relacionadas con el aspecto epistemológico de la turismología.

En habla portuguesa, "turismología" es una palabra muy difundida y utilizada desde hace años (en especial, en Brasil). Es muy numerosa la cantidad de universidades que ofrecen cursos, títulos y posgrados de turismología (Universidade de Caixas do Sul, Universidade de Fortaleza y otras. Entre los turismólogos más destacados, se encuentra la ya citada doctora Margarita Barreto.

En “Wikipedia”, el ingeniero americano John Tribe ha argumentado que una de los mayores problemas de la turismología es su indisciplina para crear saberes homogéneos, ya sea por una Academia que no dialoga con los cuerpos generados de saber turístico, o por la falta de paradigmas básicos para configurar el objeto de estudio del turismo.

Por su parte, en el mismo sitio, Francisco Muñoz de Escalona, doctor en Ciencias Económicas y Empresariales por la Universidad Complutense de Madrid que ha dedicado su investigación a la Economía y Planificación del Turismo,  advierte que la falta de un objeto específico ha llevado a una confusión fatal por parte de los primeros turisperitos (es la primera vez que empleamos este término) quienes confundieron la maduración de una ciencia con la cantidad de trabajos, publicaciones o departamentos destinados a investigación en las universidades, en lugar de prestar atención a los postulados básicos de la disciplina. La producción académica no parece ser un criterio suficiente en la consolidación de una ciencia.

En los últimos años, diversos estudios han avanzado en la expansión de la turismología como disciplina científica.​ No obstante, la disciplina aún es sustentada por las ciencias sociales.

Por su parte, Alexandre Panosso Netto, estudioso de la teoría y práctica del pensamiento turístico brasileño, y las investigaciones del profesor mejicano Marcelino Nechar, sugieren que el turismo debe ser considerado una institución social total de naturaleza reflexiva que moldea las experiencias y las cosmologías de los turistas. En los últimos años, una corriente crítica ha enfatizado en los problemas y limitaciones conceptuales de la investigación aplicada en turismo y hospitalidad. En este sentido, existe una visión excesivamente comercial del mismo enfatizando la figura del turista como el único vector de información frente a otros actores y otras metodologías. Los investigadores comúnmente realizan encuestas y entrevistas sobre los turistas que luego son tabuladas estadísticamente, esta práctica relega a otros actores que forman parte del sistema. A este grupo académico se lo conoce como corriente critica del turismo (‘critical turn’). La critica de los especialistas sobre la epistemología del turismo versa en el hecho que en un sentido la experiencia del turista no denota causalidad científica sino su propio mundo interno. Metodológicamente hablando, lo que el turista manifiesta habla de su interpretación pero no de una causalidad real entre variables.

Algunos turismólogos prefieren hablar de “ciencia del turismo” (como el italiano Alberto Sessa), o “turismografía” (como el también italiano Umberto Fragola), en lugar del neologismo "turismología".

De todos modos, hoy en día, el término turismología es la expresión más popular entre los turismólogos y es cada vez más popular en el ambiente de la disciplina.

El turismólogo o licenciado en Turismo no solo se dedica al estudio científico-académico del turismo, sino que es un profesional que debe tener una visión más amplia, tendiente a múltiples actividades.

El término turismólogo surgió en la década de 1970, con el objetivo de brindar un nombre a la categoría de profesionales del área del turismo, disciplina que mostraba en ese entonces un enorme desarrollo. Una de las características de un turismólogo es que es un experto en el turismo, debe de conocer el turismo desde un ámbito social, geográfico, económico y cultural. Es un profesional que debe tener una visión más amplia, capaz de abarcar múltiples actividades.

En la actualidad o era moderna del sector turismo, se dispone de diferentes especialidades, la más común, licenciado en Turismo. A las mismas se atribuyen funciones y conocimientos en diversos campos del turismo, es decir, variadas profesiones son las que pueden dedicarse a la actividad turística, puesto que la oferta académica de las universidades, facultades e institutos superiores, determina su enfoque y objeto de estudio.

Ello es consecuencia de que en las décadas de 1990 y las primeras del nuevo milenio, la oferta de servicios turísticos, infraestructura, planta turística, supraestructura y declaraciones de Patrimonios de la Humanidad, se han sucedido de forma constante, por lo que la necesidad de nuevos especialistas y profesionales de este sector ha sido primordial.

A continuación, enumeramos, a título enunciativo, las carreras o licenciaturas más importantes, que se desempeñan en el ámbito turístico:

  1. Licenciatura en Gestión Turística.

  2. Licenciatura en Administración Hotelera.

  3. Licenciatura en Artes Culinarias y Pastelería.

  4. Licenciatura en Administración de Bares y Restaurantes.

  5. Licenciatura en Administración del Tiempo Libre y Hospitalidad.

  6. Licenciatura en Administración Turística con Especialización en:


¿Y cuál es el perfil del turismólogo?

El que se dedique al turismo o administración turística se destaca por la importancia de esta actividad a nivel de algunos países o en carácter internacional, a su constante desarrollo. Ofrece conocimientos, actitudes y habilidades para satisfacer las necesidades relacionadas con las actividades y objetivos de los usuarios turísticos.

Cada uno de los Patrimonios de la Humanidad universal deben de ser admirados profesionalmente, porque -recalcamos- representan un enorme potencial para el desarrollo económico y promueve las relaciones culturales de diversas regionales mundiales.

El turismólogo está educado para que pueda ser partícipe en el fenómeno turístico, reconocer el contraste entre formas diversas de ser y pensar; tener conocimiento y comprensión de la riqueza cultural y natural del mundo entero.

Y lo que es más, hay un elenco de funciones o tareas adicionales que puede desarrollar:

  • La elaboración y asesoría en políticas de turismo nacionales municipales, comunitarias o insulares;

  • Elaborar el planeamiento del espacio turístico;

  • Analizar y elaborar planes para el desarrollo del turismo de un modo sustentable, basándose en factores sociales, culturales, ambientales y económicos, presentes en cada región;

  • Coordinar, desarrollar y orientar trabajos de selección y clasificación de zonas y áreas destinadas al turismo;

  • Coordinar actividades relacionadas con el ocio para la demanda turística;

  • Brindar consultoría a organizaciones del sector turístico;

  • Planear y organizar circuitos turísticos y gestionar agenciasd de viajes;

  • Fundamentos del turismo y docencia;

  • Administración y contabilidad de las empresas turísticas;

  • Ingeniería del servicio y logística en eventos sociales, grupos y convenciones;

  • Preparación de alimentos y bebidas.

  • Economía, finanzas y derecho para las empresas turísticas.

  • Control y operación del traslado y hospedaje del usuario turístico.

  • Mercadotecnia de servicios y promoción de productos turísticos.

  • Relaciones internacionales y gestión de duanas.

  • Participación y operación de Servicios Complementarios en Turismo alternativo.

  • Recorridos como guías de turistas por medio de museología, historia del arte y arquitectura.

  • Planificación de itinerarios en ecoturismo y rutas culturales o de aventura.

  • Organización y dirección de grupos de trabajo y turistas.

  • Expresión de varios idiomas para desenvolvimiento en actividades turísticas, vocación de servicio, liderazgo, creatividad, iniciativa y proactivo.

  • Conocimientos de gastronomía, viticultura, etnografía, tradiciones y coctelería.


Los estudios de turismo se inician en Canarias en el año 1966 con las Escuelas de Turismo de Tenerife y de Las Palmas, propiedad de Antonio Pedro Tejera Reyes, recientemente fallecido en Perú, además de una segunda en la capital grancanaria, de titularidad perteneciente a la Caja Insular de Ahorros, que así se denominaba entonces.

Eran tres años de carrera que se revalidaban a través de un examen con profesores que venían de la Escuela Oficial de Turismo de Madrid. Superada esta reválida, era posible obtener el título de Técnico de Empresas y Actividades Turísticas.

En 1980, la Escuela Oficial de Turismo de Madrid promueve, con rango universitario, la carrera de Técnico de Empresas y Actividades Turísticas (grado medio). En 1983 se da la oportunidad a todos los titulados anteriores para que puedan convalidar, a través de un examen a realizar en Madrid en la Escuela antes mencionada.

Dada su importancia y orgullo para Tenerife, me permito introducir que en esta convalidación realizada, como decía anteriormente en 1983, nuestro amigo hotelero y coordinador general de Calínico, hoteleros por Tenerife, Eduardo Solís García Talavera, fue el único en obtener la calificación de “10”, entre más de quinientos examinandos provenientes de toda España.

Veintidós años después, en el curso académico 1988-1989, la universidad de La Laguna incorpora los estudios de diplomatura de Técnico de Empresas y Actividades turísticas, comenzando a titular a jóvenes que lo estudiaban.

En 1999, el Proceso de Bolonia o Plan Bolonia, dio inicio a un ciclo de convergencia que tenía como objetivos facilitar el intercambio de titulados y adaptar el contenido de los estudios universitarios a las demandas del mercado, en la Unión Europea. Los estudios de turismo adquieren rango superior con Grado Turismo. Empezaban a quedar atrás el voluntarismo, el cambio de la azada por la bandeja, los idiomas autoaprendidos solo con la base fonética, los botones uniformados y aquella recordada y siempre bien ponderada mano corriente de conserjerías y recepciones. Ese voluntarismo, por cierto, no fue exclusivo de Canarias, bien es verdad que el archipiélago se adelantó a otras regiones. En Cataluña, en 1975, era expedido el título de director de hotel con un certificado de experiencia, real o no, firmado por una empresa.

Un diplomado en Empresas y Actividades Turísticas (o Gestión/Dirección de Empresas Turísticas), ya lo hemos dicho, supone poseer una formación que capacita profesionales para la gestión, dirección y optimización de negocios en el sector turístico. Ofrece habilidades en estrategias comerciales, gestión financiera, marketing y liderazgo, preparando a los egresados para puestos como gerentes de hotel, consultores, directores de agencias de viajes, y para emprender en el sector. También se enfoca en la promoción del turismo responsable y sostenible, preparando para los retos de un sector dinámico y global. 


La cátedra de turismo de la universidad lagunera, a la que hoy agasajamos, se crea en el año 2012 con el apoyo de la Caja General de Ahorros y ASHOTEL, siendo el profesor catedrático Raúl Hernández Martín, su primer y único Director.

Expresamos nuestra enhorabuena, agradecemos la atención dispensada y confiamos en que el turismo siga siendo esencial para el presente y el porvenir de Tenerife y de Canarias.




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