Es necesario ofrecer confianza y seguridad al viajero, ha venido a resumir un propósito primordial para la recuperación turística la ministra de Industria, Comercio y Turismo, Reyes Maroto, durante la presentación de una nueva campaña de promoción que se identifica con el lema, ‘Te mereces España’. Cuando quien más y quien menos cree que la temporada veraniega significará el reinicio de la actividad, se necesitan más certezas. Mejoran algunos registros pero la pandemia aún no sido vencida, ni siquiera controlada del todo. Pero es evidente que hay que fortalecer la posición del país a ver si es capaz de seguir siendo el primer destino vacacional de los principales mercados emisores. Otra cosa es contrastar que la maquinaria del negocio turístico está bien engrasada, que el personal en ERTE o situación de desempleo estará disponible a toque de pito y que los establecimientos alojativos han afrontado y concluido el proceso de modificación y adaptación a las normativas salidas de la emergencia sanitaria.
La iniciativa promocional va de mayo a julio y será desarrollada por Turespaña, un tiempo que los responsables del ministerio habrán estimado necesario y suficiente para captar contingentes de tales mercados. Téngase en cuenta que nada se sabe aún de lo que decidirán las autoridades inglesas que dejaron a Canarias fuera del semáforo verde, ni qué tipo de acuerdo alcanzarán en las cámaras legislativas de Alemania para disponer de una ordenanza, o similar, que favorezca la movilidad y reduzca, cuando menos, las restricciones en vigor. La industria de viajes germana ha estado muy expectante estos días.
Ya puestos, que nadie olvide el mercado nacional y hasta el más próximo, el insular o regional, pues demostrado está que el personal quiere desplazarse. Miren por dónde, aquel eslógan de los tiempos de Loli Palliser, a principios de la autonomía, ‘Canario conoce tu tierra’, recobra también cierta vigencia.
Lo cierto es que la ministra Maroto se muestra confiada pues “España está preparada para volver a abrirse al mundo muy pronto y recibir a todos aquellos que quieran regalarse unas vacaciones perfectas después del peor año de nuestras vidas”. En el ámbito turístico saben bien que ese superlativo no es exagerado ni se utiliza a humo de pajas. El impacto en la productividad económica es notable y no deja de ser paradójico que se confíe en el sector –el que en su conjunto más ha padecido las consecuencias- para tirar del carro dañado y volver a emprender la ruta del crecimiento.
¿Con qué y cómo? Bueno, el Gobierno espera captar este verano unos cuarenta y cinco millones de turistas extranjeros que son algo más de la mitad de los ochenta y tres millones y medio que se alojaron en territorio nacional en 2019. La ministra confía en que el futuro ‘Certificado verde digital’, con el que se podrán desplazar los extranjeros, garantice la movilidad dentro de la Unión Europea (UE). Precisamente, hablando de certezas, Reyes Maroto cree que este documento, junto al buen ritmo de vacunación, transmitirá confianza y seguridad al viajero de otras latitudes.
No va a haber, eso sí, pruebas o test PCR gratuitos para estimular la llegada de visitantes. Han calculado que debían hacerse casi cuarenta millones, con su correspondiente coste y el Gobierno cree que, ahora mismo, es más importante ayudar a las empresas turísticas a que resistan.
Veremos si es una medida acertada. Una recuperación rápida e intensa de la actividad turística, singularmente la internacional, es lo que se quiere ahora.
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