PALIATIVOS

Incrementar la conectividad, evitar la pérdida de puestos de trabajo y aliviar económicamente a las empresas afectadas es el triple campo de acción trazado por el Gobierno de Canarias para afrontar las secuelas de la fractura del turoperador británico 'Thomas Cook'. Debió pensar en un cuarto: la insatisfacción del empresariado, como ayer se pudo comprobar con los planteamientos de la patronal hotelera de Tenerife respecto de las medidas que se anuncian para el viernes próximo en el Consejo de Ministros. Lo puede intentar, está en su derecho, pero, con los antecedentes, que no aguarde cartas sugerentes.

En fin, interesa mucho saber cómo aumentar la conectividad con el extranjero, un hecho en el que insistió la pasada semana el presidente de la Confederación Española de Hoteles y Alojamientos Turísticos (Cehat), Joan Molas, como siempre con una visión muy pragmática. Resulta obvio que hay que gestionar con inteligencia y diligencia con otras compañías aéreas para cubrir el vacío producido por 'Thomas Cook'. El destino Islas Canarias, según fuentes del propio Gobierno autónomo, ha conseguido recuperar el 58 % de las plazas que se habían perdido en las conexiones aéreas con el Reino Unido. Sobre este capítulo, un primer dato de la Consejería de Turismo confirma ciento sesenta y ocho mil plazas adicionales en aviones de la aerolínea 'Jet2' y doce mil seiscientas con la compañía 'Wizzair', ambas para la temporada de invierno (octubre-marzo). El ejecutivo insiste en reordenar la inversión en promociones para impulsar acciones y campañas orientadas a corto plazo, concentradas en los mercados de Reino Unido y Alemania, con el 50 % de incremento de inversión mensual, sobre todo en la plataforma Google. De todos modos, en el sector saben que una coyuntura de esta naturaleza obliga a elaborar planes y promociones para incrementar la estancia media del visitante como fórmula para elevar el gasto medio total por viajero en las islas.

En cuanto a paliar los efectos en la población trabajadora, el ejecutivo canario ha hecho una estimación presupuestaria de dos millones de euros para afrontar políiticas activas de empleo, basadas en una actuación específica en los sectores de hostelería y turismo en los municipios más afectados por el cierre de 'Thomas Cook'. Desde la consejería de Economía, Conocimiento y Empleo hablan de programas específicos de formación para el empleo, de ayudas para el retorno a la ocupación activa en cualquier sector productivo y de acciones destinadas a la evaluación y acreditación de competencias profesionales adquiridas a través de la experiencia laboral o de vías no formales de formación en el sector de hostelería y turismo, destinadas a personas que no tengan la titulación para el ejercicio de su profesión. Se trata de mantener el empleo en las empresas afectadas que presenten Expedientes de Regulación de Empleo Temporal, objetivo al que hay que unir la movilidad para el empleo de los trabajadores afectados por la quiebra del turoperador británico, con el fin de cubrir los gastos derivados de acudir a entrevistas de trabajo o de aceptar una oferta de empleo en una isla distinta de su residencia habitual. Otra medida en este mismo ámbito: los trabajadores de las empresas que entren en proceso concursal por la fractura del turoperador británico y se vean abocadas a un ERE extintivo podrán acogerse a ayudas de 500 euros durante tres meses por trabajador.

Por último, la consejería de Hacienda, Presupuestos y Asuntos Europeos, con la adscripción de la Agencia Tributaria Canaria, ya trabaja en la definición de las empresas canarias y su facturación afectadas por la desaparición de 'Thomas Cook', de manera que en el siguiente pago trimestral del Impuesto General Indirecto de Canarias (IGIC), el que corresponde abonar en el mes de octubre (el tercer trimestre de 2019), se proceda al aplazamiento de los abonos de IGIC afectados. Este trabajo de selección de las empresas se realiza en coordinación con la Administración de la Seguridad Social.

Son, entre otros, los primeros paliativos. Habrá que hacer el seguimiento correspondiente.