martes, 28 de junio de 2011

EL VALOR DE UN VOTO

Por un voto ha perdido la mayoría Ramón Miranda, alcalde de Garachico, quien se piensa su continuidad en la corporación y parece dispuesto a dar un paso al costado para no ser obstáculo en negociaciones que permitan a su partido seguir gobernando en el municipio. A tres votos se quedó Fidela Velázquez, nueva alcaldesa de San Juan de la Rambla, de ganar con mayoría absoluta. Y seguro que, como éstos, hay muchos casos en todo el país.
Son los que sirven para apreciar mejor el valor de un voto. Un de uno, de cantidad. Seguro que en los casos citados no faltarán quienes se estarán lamentando de no haber acudido a las urnas. Por un solo voto se pierde una mayoría. Por sólo tres votos no se alcanza. Y claro, eso conlleva poner en peligro la gobernabilidad o dar pie a combinaciones que terminan desvirtuando el sentido mayoritario del electorado.
Se lamenten pero que sepan que no hay nada que hacer. Tanto fomento del abstencionismo produce estos hechos. De ahí que las apelaciones al ejercicio del sufragio, por parte de políticos y de personas de toda condición que saben lo que se juega en cada cita electoral, nunca sobran. La participación es uno de los datos básicos para auscultar la salud y la madurez democrática de una sociedad.
Votar es primordial. Que se lo digan a quienes se han quedado en puertas de una mayoría o a quienes han tenido que afrontar un proceso de negociaciones para garantizar la estabilidad y la gobernabilidad de una institución.
Quienes hacen dejación, quienes se desentienden de las urnas tienen en estos casos un claro ejemplo de lo que significa su actitud.

lunes, 27 de junio de 2011

TIEMPO DE PACTOS

Las etapas de las mayorías absolutas hicieron pensar a más de uno que se iban a reeditar sistemáticamente y fueron condicionando, desde todos los ángulos, las necesarias alianzas para proporcionar estabilidad y afrontar la gobernabilidad de las instituciones. Algunas de esas mayorías fueron muy mal administradas, generaron excesos, caudillismos y fundamentalismos que terminaron cansando a los electorados que castigaron e invirtieron tendencias, favoreciendo cambios dinamizados también por cierta evolución sociológica.

Las mayorías suelen conllevar el empleo del rodillo, consistente en rechazar, sin más, iniciativas que provengan de los grupos de oposición, a pesar de que sean positivas para los intereses generales o estén cargadas de razón. En otras ocasiones, sirven para bloquear, para impedir una convocatoria que puede ser oportuna o el tratamiento de un asunto que, por sus características, significa un giro, un avance, un esclarecimiento y hasta una vía para salir de una crisis. La falta de diálogo, los personalismos y las intolerancias son otras consecuencias de haber ganado por goleada sin tener presente que el encuentro tiene su tiempo reglamentado y que en el futuro las circunstancias pueden ser otras.

Las mayorías políticas reiteradas en instituciones públicas han ido acumulando, en algunos casos, tal suerte de rechazo que, cuando se evaporan, es natural que la otra parte, los eternos segundones o perdedores se rebelen, se revuelvan o se quieran desquita, en la acepción más política del término. Es un hecho casi natural que se explica por sí sólo en ámbitos pequeños o en circunscripciones reducidas. Las enemistades, las pugnas tribales y hasta las diferencias familiares -a veces insalvables- acaban predominando. En algunas islas y en algunas localidades canarias se ha venido asistiendo a estos episodios. Que pongan las barbas en remojo quienes aún disfrutan de esa mayoría (tiene mucho mérito lograrla y revalidarla, desde luego), no sea que en el futuro, si no gozan de ella, se vean afectados por las turbulencias que son fácilmente adivinables.

Cuando los electorados reparten y no propician mayorías absolutas, vienen a decir que prefieren otra forma de gobernar y emiten un mensaje que, en buena parte de los casos, se puede interpretar como “entiéndanse ustedes”. Negocien, intercambien, pacten y “entiéndanse” para gobernar. Aparquen diferencias y hasta planteamientos ideológicos, renuncien si es necesario, pero “entiéndanse”.

Es ahí, entonces, donde se pone a prueba la capacidad de diálogo y de transigencia, donde se fragua la cultura del pacto o de la alianza política que hay que ir practicando y consolidando para favorecer, sin extrañarse, fórmulas de gobernabilidad de las instituciones. No estamos muy acostumbrados a ella y hay que agradecer a quienes la hayan practicado para timonear sus mandatos o sus cometidos la inversión realizada.

Es una cultura que requiere de información, transparencia y hasta de un sentido pedagógico que facilite todas las explicaciones y otorgue razones a los partidarios de defender los contenidos y las aspiraciones de una alianza política. Mucho más, cuando se trata de coaliciones integradas por formaciones políticas en principio antagónicas.

Valen los gestos y las pruebas de lealtad para que funcionen bien, con holgura, sin perturbaciones que levanten recelos y sospechas. Pero valen, sobre todo, los hechos que claramente den a entender que se cogobierna en beneficio no sólo de la mayoría que se representa sino de los intereses generales de una comunidad.

domingo, 26 de junio de 2011

EL GOL. ¡ERA EN FUERA DE JUEGO!

Celebro, en primer lugar, tener entre los lectores al secretario del Ayuntamiento del Puerto de la Cruz. Y que haya aprovechado, en segundo término, el resquicio legal que dejábamos en nuestra entrega titulada “Surrealismo e irrespeto” para colar toda una tesis técnico-jurídica con la que ha intentado menoscabar una idea: es un principio sagrado de la democracia que en elección y destitución de cargos, la votación -le guste más o menos al secretario- ha de ser siempre secreta. Como los delanteros que acechan, aprovechó el resquicio.

No es mi intención polemizar con el secretario. Y además, en su terreno, ando en inferioridad de condiciones. Era difícil imaginar que una simple afirmación de un contexto periodístico iba a generar su respetuoso alegato que es, naturalmente, merecedor de réplica, con la que pretendo ratificar un planteamiento expuesto a raíz de la elección de alcalde en el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz el pasado 11 de junio. Escribimos entonces -y ahí situamos al lector- que “para colmo, los hechos se consuman con una votación a mano alzada. ¡Vaya gol el del secretario del Ayuntamiento! Aunque haya un resquicio legal. Y qué capacidad de encaje de portavoces o candidatos de otras formaciones que no rechistaron. Porque es un principio sagrado de la democracia que en dos situaciones, la elección o destitución (censura) de cargos electos, se hace mediante votación secreta. En urna, sí. Quedará ello como anécdota pero reveladora de la singularidad del episodio en el que, paradójicamente, esa circunstancia fue la única no improvisada”.

Domingo Jesús Hernández Hernández, secretario general del Ayuntamiento portuense, cuya vida guarde Dios muchos años, responde negativamente y cuestiona el principio aludido. Igual pudimos emplear otro adjetivo para aludir a la inmodificabilidad de ciertas reglas pero bueno, aquí se trata de discernir en qué baso su remate. Porque, repasando la moviola y sus argumentaciones, da la sensación que lo hizo en fuera de juego. Y aunque el gol ha sido dado por válido y subió al marcador, podemos seguir criticando el método.

A ver, señor secretario: la elección democrática de alcalde, en el Puerto de la Cruz, desde 1979, se ha hecho siempre mediante votación secreta. Y en la geografía de la práctica totalidad de los ayuntamientos canarios, se emplea el mismo método. Sería interesante que solicitara información de sus colegas, a ver cuántos han utilizado una fórmula de votación distinta. Porque al afirmar en su escrito que la votación de la elección ha sido la denominada ordinaria, a partir de lo dispuesto en la Ley electoral de 1985, el secretario general da por sentado que sus homólogos han obrado incorrectamente o incluso vulnerando la normativa.

Otra afirmación secretarial: en las mociones de censura (utilizamos este último término para equipararlo a destitución de cargos), siempre se aplica la votación denominada nominal. Eso es tanto como decir que en todos los sitios donde se haya hecho secreta -y ya se contabilizan unos cuantos- se ha incumplido la norma. Bien sabe el secretario que ni en la Ley orgánica electoral de 1985 ni en la Ley Reguladora de las Bases del Régimen Local de 1985 ni el Real Decreto de 1986 por el que se aprueba el Reglamento de Organización, Funcionamiento y Régimen Jurídico de las Entidades Locales (ROF) se encuentra un precepto, en el caso de la moción de censura, que señale que la votación sea nominal. En caso contrario, si nos los señala, rectificamos nuestra apreciación, ya que el ROF prescribe que “la votación nominal requerirá la solicitud de un grupo municipal aprobada por el Pleno por una mayoría simple en votación ordinaria”. (Artículo 102. 2).

Prefiere uno, modesto aprendiz e intérprete de la realidad, defender ciertos principios, siquiera por su estética y comparar situaciones, acaso por haber vivido alguna de ellas y haber asistido posteriormente a todo un debate no zanjado del todo. En ese sentido, el secretario del Ayuntamiento portuense da por válida una sentencia, relativa a la elección de alcaldes, sin concretar si ha sido recurrida o si ha sentado jurisprudencia. Y con otra, referida a una equivocación verbal rectificada (No/Si) cometida por una concejala en el curso de una votación nominal, en una sesión plenaria en la que se debatía una moción de censura, además de elevarla impropiamente de categoría, se olvida que la votación secreta no fue la cosa juzgada (¿se dice así?) ya que no fue impugnada pues lo reclamado y juzgado era si se contabilizaba el voto negativo o el positivo de la concejala, lo que determinaba si la moción de censura prosperaba o no. Por tanto, no procede pronunciamiento del Tribunal sobre la forma de la votación y del posible acto nulo de pleno derecho por afectar a derechos fundamentales y ello conforme lo establecido en el artículo 62 de la Ley 30/1992, de 26 de noviembre, de Régimen Jurídico de las Administraciones Públicas y del Procedimiento Administrativo Común.

La sensación que queda es que el secretario, en su afán de sostenella y no enmendalla, o de defender a toda costa el gol anotado, maneja derecho positivo a conveniencia. Si cabe colegir del artículo 102 del ROF que el espíritu del legislador era dejar a criterio facultativo el sistema de votación en determinados supuestos, la mezcla y la relación inconexa de determinados preceptos por su parte no ha sido, con el debido respeto, muy afortunada. Algunos de los que ha reproducido no tienen nada que ver con la sustancia que nos ocupa: sirva de ejemplo el citado artículo 140 de la Ley Orgánica 5/1985, de 19 de junio, del Régimen Electoral General.

Aquí, conforme a un elemental procedimiento secuenciado, parece claro que, al no estar constituida la corporación, no son de aplicación detalles de normas que regulan el desarrollo de los asuntos que son tratados en las sesiones y el sistema de votación de las corporaciones ya constituidas. O lo que es igual: el secretario no tiene la competencia para determinar dicho sistema.

Otra cosa es que el mismo favoreciera las pretensiones de un alcalde y sus apoyos circunstanciales, que no habían firmado un documento de mínimos -¿entiende ahora el secretario el surrealismo y el irrespeto?- para explicar al pueblo en qué consistía su alianza o por qué se orientaba una votación en determinada dirección. Y un añadido al respecto: ninguno de los portavoces hizo nada para impedir el gol que, repasada la secuencia y pese a las explicaciones técnico-jurídicas, con los debidos respetos, fue marcado en fuera de juego.

Pero ha sido concedido como válido y le ha correspondido dar fe de ello para la posteridad, a todos los efectos que proceda. Y como demócrata, uno lo acepta. Otra vez: gracias por leerme, de verdad.


sábado, 25 de junio de 2011

NUEVA SEDE POLICIAL

La reciente denuncia de una representación sindical del Cuerpo Nacional de Policía (CNP), referida al manifiestamente mejorable estado de sus dependencias en el Puerto de la Cruz, refresca la ya vieja aspiración de contar en la ciudad con una instalación policial apropiada. Ahora que el Consorcio para la rehabilitación turística y urbanística se ha puesto en marcha, sería bueno que sus responsables proyectaran una actuación dotacional consecuente.

Recordemos que la comisaría del CNP tiene jurisdicción en los términos municipales del Puerto de la Cruz y Los Realejos. Hace muchos años que fue localizada en un antiguo establecimiento residencia turístico (El bajío), tras unas obras interiores de adaptación que han ido precisando de reformas o mejoras puntuales. A estas alturas ya puede hablarse de obsolescencia y de no estar a la altura de las exigencias de una ciudad turística y de un área poblacional muy superior al de su propio ámbito jurisdiccional. Unas mejores prestaciones, en el marco de una mayor seguridad en la convivencia, son el gran objetivo.

A lo largo de los últimos tiempos se han sucedido los intentos para impulsar la construcción de una nueva comisaría. Nos consta que ha habido voluntad política pero ha chocado con distintos imponderables. El comienzo de un nuevo ciclo político, el interés de las administraciones competentes, la puesta en marcha de ese Consorcio, los afanes del propio Cuerpo y las aspiraciones de la ciudadanía convergen en la necesidad de acometer sin dilación este recurso dotacional.

Si la memoria no falla y si no se han producido modificaciones, había una parcela del polígono San Felipe-El Tejar reservada para esta finalidad en el Plan General de Ordenación (PGO). El Ministerio del Interior manifestó su predisposición favorable siempre que se dispusiera de terrenos. En una actuación de este tipo, el entendimiento o la cooperación entre instituciones es primordial. Y como el fin común que se persigue es beneficioso, se trata de materializar los recursos de la forma más operativa. Si se mantiene el destino de la parcela, se trata ahora de convenir los términos de la actuación. Por tanto, de hacer las correspondientes previsiones presupuestarias.

Otro apunte: la futura dotación policial podría albergar, incluso, la sede de la policía local. Dicho así podría significar hasta un impacto inicialmente difícil de digerir pero, desde un punto de vista racional, pensando en las prestaciones, es lo más operativo. Desde hace tiempo también, la policía municipal se viene enfrentando a problemas de espacio en su sede de las casas consistoriales en la plaza de Europa.

Se pondría a prueba, ya sin dobleces, todo eso de la coordinación entre los cuerpos policiales. El manejo de recursos comunes (bases de datos, diligencias, notificaciones y otros, como el traslado de detenidos) se vería sensiblemente mejorado en caso de convivir en un mismo edificio. Cabe confiar en que el proyecto de la localización incluya la mejor accesibilidad posible, tanto la rodada como la peatonal y la exigida para los discapacitados.

Conclusiones: una necesidad perentoria, una voluntad de mejores prestaciones y de condiciones de trabajo, unos recursos que se deben aprovechar y una actuación que, si cristaliza, acreditará que la cooperación entre distintas administraciones públicas es factible. Si esta al alcance, no dejen escapar la oportunidad.

Porque tal como están las cosas, una vez alcanzado tan alto grado de escepticismo, la ciudadanía lo ponderará.

miércoles, 22 de junio de 2011

SEVERINA PÉREZ, ADIÓS DE UNA MAESTRA

Llegó destinada a la escuela infantil ‘Clara Marrero’, en el portuense barrio de La Vera, en 1986. Aquí llegó y aquí se quedó, para ejercer como directora del centro durante catorce años.
Ahora pone punto final a un magisterio comprometido, desarrollado entre dificultades y esperanzas, entre limitaciones y soluciones imaginativas para que los alumnos, sobre todo, no dejaran de percibir las enseñanzas. Sus compañeras de claustro siempre le agradecerán su constancia, un peculiar celo que se convirtió durante cursos y cursos en el mejor estimulante de un quehacer incesante.
Severina, Severina Pérez Alonso, se despide hoy sin alharacas, con la modestia que siempre caracterizó su ejercicio docente. La escuela, pionera en su especialidad en el norte de Tenerife, le va a echar de menos. Y también el barrio, La Vera, en el que se integró, el núcleo que logró entender como pocas personas.
Severina llegó para quedarse. Nacida a principios de los cincuenta, es del plan de 1967. Cursó magisterio en la antigua Escuela Normal de La Laguna. En el ámbito de la privada empezó a curtirse en la docencia: primero, en el colegio Fray Martín de Porres; luego, dos años en el Luther King.
Su primer destino en el sector público fue en Breña Alta (La Palma), hasta que, a mediados de los años ochenta, se incorporó a la escuela infantil ‘Clara Marrero’ en cuyo claustro, de ocho profesoras, ha sido una compañera leal y predispuesta siempre para mejorar el nivel del centro.
Severina entendió pronto que La Vera era un sector que necesitaba de entrega y comprensión. Mucha paciencia invirtió para asimilar los problemas de todo tipo que iban surgiendo en un barrio que crecía y cuya población, muy heterogénea en sus orígenes y en su condición social, precisaba integrarse y vertebrarse. En ese crecimiento de La Vera, Severina ha tenido mucho que ver: ha sido un proceso en el que ha participado tan silenciosa como eficazmente. Había que educar y a eso se dedicó. Ecuánime, sensible, seria y amable a la vez: no ha conocido desánimo, pese a los reveses; ni se arrugó frente a las adversidades. Fue maestra y madre a la vez. Fue compañera y vecina al mismo tiempo. Se granjeó el afecto de la gente del barrio.
Para eso se implicó en todos los proyectos relacionados con la mejora de este núcleo de población cuyos rincones conoció con exactitud. Potenció, como no se conocía antes, las relaciones escuela-familia. Y como buscaba tiempo, mientras escuchaba quejas, lamentos, llantos o anhelos, encontró el suficiente para su proyecto de circulación vial que ha merecido varios premios otorgados por la Dirección General de Tráfico.
Severina, en fin, no será una maestra más sino que será recordada por muchas cualidades. Supo crear y mantener un clima de armonía y buen hacer con toda la comunidad educativa. La gente de La Vera, que es agradecida y de buen corazón, sabrá reconocérselo. Seguro, además, que ella no se irá del todo. Ahora, con más tiempo libre para escribir cuentos y para caminar, sus grandes aficiones, paseará por las calles del barrio y se detendrá a hablar con los padres y madres de sus alumnas. Escuchará, como hizo siempre desde que llegó, y transmitirá, a su manera, ese espíritu de sacrificio que ha lucido a lo largo de una rica vida profesional y que le permitió salir airosa de no pocas tribulaciones.
Cuando hoy se despida y cruce por última vez como directora la puerta del ‘Clara Marrero’, habrá acumulado razones para que le dispensen gratitud y reconocimiento.

martes, 21 de junio de 2011

NUEVO CICLO EN CANARIAS

Se inicia hoy la octava legislatura en el Parlamento de Canarias. Un nuevo ciclo político con otra alianza política, similar a la de la tercera, quebrada a mitad de camino por mor de una insólita censura. En aquella oportunidad, aún no nacida pero sí gestada Coalición Canaria -nunca se aprovechó mejor una coyuntura de poder para alumbrar una nueva organización política que signifcara un salto de calado- los socialistas esgrimían su condición de primera fuerza en votos y en diputados. Ahora, es Coalición Canaria la que va por delante.
Una legislatura que arranca con todas las incertidumbres pero también con muchas expectativas. Las circunstancias hacen más difícil la gobernabilidad pero las partes que han negociado un pacto que apuesta por la estabilidad han de esforzarse para que funcione desde el primer día con lealtad y marcada voluntad de satisfacer las aspiraciones de los canarios. El descontento está en la calle, ya se ha visto, y no será fácil enjugarlo.
Los socialistas tocan poder al cabo de dieciocho años. Una larga travesía en el desierto quemando candidatos, además de energías, ideas y sentido de la responsabilidad. Curiosamente, por esas peculiaridades de nuestro régimen electoral, cuando han cosechado los peores resultados, es cuando han recuperado parcelas de poder autonómico que, unidas a las del insular y municipal, permiten que la organización timonee el estancamiento y la crisis. Pero timonear, en este caso, significa que hay que seguir sorteando no pocas dificultades, especialmente con vistas al fuuro.
Nuevo ciclo. A la pomposidad y solemnidad de hoy seguirá la investidura y la constitución del nuevo ejecutivo. Los medios tienen mes y medio más para llenar páginas y espacios. Cien días, un suponer, para hablar de sorpresas, impresiones, propósitos, gestos y primeras decisiones.
El carrusel de la política canaria sigue su curso.

lunes, 20 de junio de 2011

ONDAS UNIDAS

Desde primeras horas de la mañana hay una señal radiofónica compartida, al menos en la provincia occidental. Es la de las emisoras de frecuencia modulada que vienen emitiendo desde hace años y han quedado excluidas del concurso público de adjudicación de frecuencias convocado por el Gobierno de Canarias. Hoy lo están haciendo de forma solidaria, un solo indicativo, una sola señal: han unido sus emisiones durante cuatro horas para expresar, conjuntamente, al unísono, su disconformidad, su queja, su lamento, su apelación, acaso su última carta.
La iniciativa tiene su razón de ser. Los resultados del concurso no sólo no han gustado sino que han significado, de materializarse al pie de la letra, el cierre, la práctica desaparición de medios ya consolidados, de pequeñas empresas surgidas al calor de una vocación profesional y hasta de un esfuerzo personal o familiar. Empresas que no tienen culpa de la situación de vacío, o de alegalidad que ahora, cuando se ha querido regularizar, porque es necesario que eso ocurra, ha contado con una fórmula que no contenta a muchísimas personas.
Lo peor, la consecuencia más directa es la destrucción de empleo, ahora mismo el principal mal que afecta a la profesión periodística.
Y todo por un 'sostenella y no enmendalla' que el anterior Gobierno de Canarias fijó cuando desde los bancos de la oposición (socialistas más populares) se planteó que el asunto quedara sobre la mesa a la espera de que discurriera la campaña electoral y el nuevo ejecutivo, se supone que menos presionado o menos condicionado, resolviera. Pues menuda papeleta política, ahora que andan en la conformación del nuevo gobierno. La presión, ahora, es más visibe y apreciable.
Resolver, además, no será fácil después de la primera determinación del órgano que ha evaluado con arreglo a las bases del concurso y que ha hecho una preadjudicacón. Menuda papeleta. La experiencia y lo ocurrido con el concurso para adjudicar las licencias de la Televisión Digital Terrestre (TDT) no han servido. ¿Y dónde está el Consejo Audiovisual que supuestamente ha de velar por el cumplimiento de todas las disposiciones reguladora?
Porque no olvidemos: estamos en un Estado de derecho y por sus cauces hay que decidir y respetar. Si es así, aunque estemos todos de acuerdo en que es una vía lenta, aquí cabe vislumbrar que quienes se sientan perjudicados presenten recursos y apelen. Y así se prolongará la situación, no se sabe hasta cuándo ni hasta dónde.
A un comunicado de la Asociación de la Prensa de Santa Cruz de Tenerife nos remitimos para entender mejor que la resolución inicial favorece la especulación y que, desde el punto de vista social y laboral, las consecuencias son tremendas. Por supuesto, ni que decir tiene que el pluralismo en el conjunto de la oferta informativa del archipiélago, vía radiofónica, se ve muy mermado. Por eso, la dirección de la Asociación planteaba sin dobleces hasta dónde es posible la revisión del concurso.
Estamos pues ante un quebranto de considerables proporciones. La señal solidaria de hoy por la mañana, en vísperas de la constitución del Parlamento de Canarias, es una invitación a la reflexión, mejor dicho, casi un canto a la desesperada. Reflexiones a estas alturas parecen una pantomima estéril.
En esa realización conjunta, con muy escasos precedentes en el archipiélago canario, hemos dejado nuestro testimonio junto al de tantos otros amigos y compañeros que jamás abandonaron su vocación por el medio y han seguido luchando desde distintos micrófonos y distintas antenas para materializarla y para hacer una compañía de verdad.
Por eso, ahora que esa compañía corre serio riesgo e verse cercenada, nos acordamos de una estrofa de una canción de Dyango titulada, precisamente, "La radio":
"Quiero que no desesperes la belleza de la noche.
Y estos tus amigos de la radio
con canciones te dirán (que ya pronto volverá).
Es tu buena compañía, la radio"
La emisión conjunta de esta mañana es una invitación a la lucha. Radiofonistas en pro de sus medios. A ver si tocando todas las teclas, a ver si las ondas propagando la misma señal de un mismo fin invierten la situación.
¡Ánimo!

sábado, 18 de junio de 2011

SURREALISMO E IRRESPETO

Ya saben que la política canaria depara episodios surrealistas, situaciones de ésas que uno se cree que nunca van a suceder, pero se producen, con todas las consecuencias, se aceptan y sigue el tiovivo girando sin que pase absolutamente nada.
La última es la registrada en el acto de elección de alcalde del Puerto de la Cruz, donde la suma de los concejales de Coalición Canaria y Partido Popular propició la elección del candidato de la primera, Marcos Brito Gutiérrez.
(Paréntesis: superados los cuatro años de nuestra pertenencia a la corporación municipal, es tiempo suficiente para aparcar el propósito, ya consumado, de no emitir juicios de opinión sobre la política local. Quedó formulado en su día como declaración de principios. Salvo en algún episodio muy concreto, la hemos cumplido a grandes rasgos, de modo que queda constancia expresa de esta “liberación” que nos permitirá seguir expresando las consideraciones que los asuntos municipales nos merezcan).
Estábamos con la elección del alcalde portuense. Resulta un hecho insólito que se haya consumado sin un papel de mínimos, un folio con tres o cuatro bases y ya llegará el documento. Que digan que es un pacto de caballeros, si quieren, pero que no olviden que en política la caballerosidad no es una cualidad ponderable, y que digan que es el “pacto natural” -¡vaya naturaleza la moldeada a gusto de las conveniencias!- pero que no se respeten las formas elementales de la democracia refleja que sus imperfecciones bien merecen otras pruebas, otros hechos que la hagan madurar y funcionar mejor.
Coalición Canaria y Partido Popular estuvieron negociando durante prácticamente tres semanas el reparto de áreas y las tenencias de alcaldía. Negociaron infructuosamente. Nada trascendió de prioridades y de alternativas a los problemas del municipio. Tan sin resultados se encontraban, que en la madrugada del sábado, se dieron las partes un apretón de manos y decidieron que había que investir a Brito como alcalde.
Es una falta de respeto. A los órganos de los partidos, a sus bases, a la ciudadanía. Que no se informe de las condiciones en que se produce una decisión de ese calado, es una irrespetuosidad. Nos gustaría saber si hay antecedentes de una situación similar en algún rincón de la intrincada geografía política.
La seriedad y la solidez de una alianza entre políticos empiezan precisamente por la claridad y la transparencia de su contenido. Eso significa documento, revisable si se quiere, pero constancia expresa para que todos sepan, para que todos sepamos lo que hay. Porque estamos hablando de la gobernabilidad de un municipio. Y eso no es un simple reparto de cromos o una entente para asignarse retribuciones.
Y para colmo, los hechos se consuman con una votación a mano alzada. ¡Vaya gol el del secretario del Ayuntamiento! Aunque haya un resquicio legal. Y qué capacidad de encaje de portavoces o candidatos de otras formaciones que no rechistaron. Porque es un principio sagrado de la democracia que en dos situaciones, la elección o destitución (censura) de cargos electos, se hace mediante votación secreta. En urna, sí. Quedará ello como anécdota pero reveladora de la singularidad del episodio en el que, paradójicamente, esa circunstancia fue la única no improvisada.
Total, que Brito de nuevo alcalde por decisión de un Partido Popular que en el Puerto no escarmienta. A los precedentes, desde aquel error histórico de 1995, hay que remitirse. En los pasados comicios no subió tanto como en otras localidades pero mejoró ligeramente los resultados de anteriores convocatorias, cuando se movió entre dos y tres concejales. Ahora, con cuatro, y con perspectivas razonables de seguir al alza, tenía mayor capacidad de exigencia. Pero, en el decisivo momento del arranque, ya exhibió cartas de ir aguantando y resignándose, a la espera, un suponer, de que fructifiquen las negociaciones tras las cuales aportar unos resultados ¿insuperables?
Resultados que, al día de la fecha, una semana después de constituida la nueva corporación, no se conocen.
Surrealista.

jueves, 16 de junio de 2011

EN MEMORIA DE ALFONSO HERGA

Fue a quien primero leímos los vocablos tritón y ondina.
Era un entusiasta de la natación; en realidad, de todos los deportes. Practicó, allá cuando un descampado o una pista o una superficie térrea servían para improvisar una partida de algo y si había que hacer un torneo, pues también. Tiempos de escasez, de carencia de instalaciones: no importaba, se jugaba descalzo o con lonas.
Alto, espigado, fornido: cuerpo de atleta, cuerpo de deportista.
Atento, servicial, solidario. Una persona solidaria.
Y encima, escribía, hacía las crónicas de encuentros de todas las categorías o firmaba breves entrevistas con quienes destacaban en el reducido marco del deporte portuense.
Ayer tarde le acompañamos a su última morada. Murió Alfonso Hernández García, hijo de Sixta y Chencho, un popular policía municipal capaz de lidiar cualquier situación. En cierta ocasión, en el campo "El Molino", de Icod de los Vinos, reprochó al árbitro una decisión sin insultarle. Estaba a su lado. Un guardia civil mal encarado le llamó y le pidió la documentación. Chencho, que seguía atentamente la escena, dejó hacer y cuando los ánimos se serenaron, convenció al guardia de que la expresión proferida por su hijo no era merecedora de aquella demostración de autoridad.
Alfonso empleaba un seudónimo de vez en cuando, Alfonso Herga. Tenía una excelente caligrafía y escribía a máquina con mucha soltura.
Le estaré eternamente agradecido: cuando uno vestía calzón corto y la vocación periodística nos hacía seguir las competiciones de las categorías de base, entregaba los escritos a Alfonso para que los hiciera llegar a la redacción de Aire Libre y Jornada Deportiva, las publicaciones en las que colaborábamos regularmente. El era ya conocido de Julio Fernández, Domingo Rodríguez, Alvaro Castañeda, Salvador Pérez y Juan Carlos Carballo que entonces controlaban la información deportiva. Utilizaba el correo postal ordinario y años después, la guagua, el "expreso" que hacía la ruta Santa Cruz-Puerto Cruz. Además, insertaba textos en el boletín que periódicamente editaba el Club Natación Martiánez. Guardaba recortes y coleccionaba sellos y postales.
Sus ocupaciones profesionales le fueron alejando del mundillo deportivo, de modo que mermaron las colaboraciones periodísticas. Fue de los que me animó a que prosiguiera y mantuviera siempre el principio de ecuanimidad en cualquier crónica.
Fue a quien primero leímos los vocablos tritón y ondina. Firmaba Alfonso Herga.
Le recordaremos siempre. Descanse en paz.

MARIA ROSA ALONSO, LA PREGONERA

Ocurrió en julio de 2002. Costó lo suyo pero desde la alcaldía logramos convencer a María Rosa Alonso para que pregonara las portuenses Fiestas de Julio de aquel año. Lo hizo; fue una pregonera de lujo. Cuando finalizó su intervención y la agradecíamos no pudimos evitar expresar un sentimiento de frustración: aquella pieza suya, tan vibrante, tan vehemente, tan llena de matices y contenidos, no fue recogida por ninguna cámara con sonido incorporado, por ningún magnetofón. Apenas una foto, remitida si no recuerdo mal por Isauro García-Panasco y publicada en el número de junio por la revista Tangentes, daba fe del acto.
Sin embargo, rebuscando en hemeroteca -con la facilidad y la prontitud que aporta internet-, hemos encontrado dos testimonios que propician retrotraerse a aquel episodio y superar el vacío frustrante del que hablamos.
Uno, el de la propia María Rosa Alonso, de su puño y letra, con un texto publicado el domingo 14 de julio en El Día, con el título “Otra vez la ñamera de la plaza del Charco”. Escribía lo siguiente:

“NO QUERÍA HACER LO que llaman un pregón de fiestas. Tengo que terminar unos trabajos, a ver si puedo, antes de cascar, y el señor alcalde de mi antiguo y gran amor, el Puerto de la Cruz, persona atenta y educada en este mundo, donde tales seres ya no abundan, casi me presionó para que este año fuera la encargada de tal misión. Me ha costado un esfuerzo cumplir los deseos de Don Salvador García, además de alcalde, diligente periodista, porque el Puerto ha tenido una extensa cantidad de personas importantes, tanto insulares como peninsulares y extranjeras, que han cantado sus bellezas geográficas y su noble discurrir histórico. Es muy difícil decir algo nuevo sobre el Puerto de la Cruz. Por otro lado, los a veces sufridos oyentes suelen mirar las manos del pregonero a ver si adivinan cuántas hojas le quedan por leer y una de mis más grandes preocupaciones actuales es no dar la lata a mis voluntarios oyentes, ni cansarlos, una tendencia natural de los viejos, porque llevamos mucho pasado sobre nuestras espaldas.
He tenido que ponerme al día releyendo montones de trabajos que conservo sobre el Puerto, pero olvidados, y consultar unos cuantos libros leídos hace muchos años, mas al leer en éste (gracias a la bondad del señor alcalde que me lo ha obsequiado) el libro
Puerto de la Cruz. Historia y anécdotas, del escritor austriaco y senador de Viena, señor Hans Köning, que acaba de aparecer y he leído íntegro, ya vi mi necesidad de saludar a los portuenses que tuvieran la amabilidad de oírme y dar mis excusas y hasta pedir perdón a una vieja amiga, a la que involuntariamente he ofendido, por ignorancia y ligereza mía. El señor Hans Köning, en la página 28 de su ameno e interesante libro, reproduce un articulito escrito por mí, desde Madrid, en 1951. Se trata de tres párrafos nada más que, por no desairar a mis entonces amigos del Puerto, les envié, en los días que me tocó leer mi tesis doctoral sobre Antonio de Viana (1578-¿1650?) en la entonces llamada Universidad Central. Mis amigos del Puerto han muerto casi todos. Hay algunos que ya no viven en el Puerto, como la señora Candelaria Reimers de González, pero entonces era una criatura muy joven y muy bella, por cierto, que a veces me llama por teléfono. Ignoro si está por la patria de los Iriarte, la grata señora María de Cobiella, esposa del desaparecido doctor Celestino Cobiella, muy buenos amigos míos los dos. Recordar tantos amigos que han vivido en este espacio y me los ha llevado el tiempo es para mí sumamente ingrato y doloroso.
El señor Hans Köning reproduce mi trabajito titulado
La ñamera de la Plaza del Charco, que la noche del 5 de julio leyó, después de mis palabras, el señor alcalde. Yo, desde mi ignorancia, había escrito de la ñamera: "anchas y rotundas sus hojas suplen una ausencia de flores que no tiene ni necesita". El señor Köning reproduce íntegro mi citado trabajito y en su libro supone ser una especie de ameno cicerone que enseña los encantos del Puerto a un posible visitante con el que habla y le dice sobre mi prosa lo siguiente: "Quizá encuentre Vd. estos renglones algo exagerados, pero en el futuro Vd. mismo le rendirá más respeto a nuestra ñamera, cuando vuelva a pasar por su lado apresuradamente, o bien a observarla detenidamente. Ciertamente sabe Vd. muy bien por las páginas anteriores, que la planta tiene flores, aunque no se pueden ver bien. Pero desde luego, las poetisas no tienen por qué ser botánicas". ¡Lo que son los años! Al leer el desdén que tan sabio senador vienés lanza sobre esta infeliz María Rosa Alonso, que él supone "poetisa" (¡qué más hubiera querido yo haberlo sido, pero buena!), me reí del justo rapapolvo que me lanza tan excelente admirador del Puerto, pero no piense nadie que se trata de una risa desdeñosa, porque entre mis defectos no figura el de ser maleducada y soy respetuosa con todo el mundo.
Mi risa se produjo al pensar en lo que habrían disfrutado mis enemigos, pues los tuve en mi juventud y madurez, incluso en el Puerto de la Cruz, al leer el justo y merecido varapalo recibido con humildad por mi parte. Pero están todos muertos y también lo siento, porque si uno carece de enemigos se aburre.
Ahora bien, donde se pasa una chispita el ilustre escritor vienés (¡con lo que a mi me encanta Viena!) es el suponer que no tengo respeto a la ñamera. Muy señor mío: sepa usted que no consiento a nadie un amor superior al mío por tan gran amiga, ofendida por mi ignorancia. He aprendido ahora, con nuestro Viera, el nombre científico de mi amiga: es la
Arum Colocasia de Linneo, hoy Colocasia esculenta . Y confieso y así lo dije con la solemnidad de un "confiteor" ante los portuenses que me escucharon la otra noche. Del mismo modo declaro que, aunque no soy poetisa, sí tenía la obligación de saber que la ñamera posee flores y las debe tener, aunque mi mala vista no las haya captado nunca, porque tampoco he vivido en el amado Puerto de la Cruz, pero quitarle a una planta sus flores es como arrancarle a una buena madre sus hijos. Estoy segura que la ñamera me ha escuchado y conoce mi admiración por ella. Al lado de tantos bustos que en el Puerto existen: del gran Franchi Alfaro, del inolvidable Don Francisco Bonnin, de Viera, de Domingo Pérez Trujillo, "el hombre bueno", y algunos más, ella, que no es un recuerdo estatuario, sigue verde, frondosa y está viva. Es el centro de mesa, como ya he escrito de la bella Plaza del Charco; el único testigo de mi juventud perdida, que en el Puerto me queda. Testigo y gran amiga.
Cuando Don Cristóbal del Hoyo, aquel delicioso trapisondista, al fugarse de Paso Alto, se embarcó en el Puerto, rumbo a la Madera, por 1732 escribió un soneto, muy conocido, despidiéndose del Teide. Algunos tinerfeños de mi época nos sabíamos de memoria el soneto, más plagio que imitación del atribuido al poeta portugués Francisco Rodrigues (con ese) Lobo al Tajo, pero el soneto de nuestro Vizconde de Buen Paso está plagiado con un cierto ajuste y le dice al Teide: "Yo me voy, tú te quedas y consiste / tu gloria en eso y la crueldad de mi hado".
Sé que, cuando cumpla mi tiempo, aquí seguirá la ñamera: hermosa, redonda, verde y... con sus flores, aunque pocos las vean, como no supe verlas yo”.
Dos días antes, también en El Día, Luciano Lemus Izquierdo, otro enamorado del Puerto de la Cruz que dejó muchos afanes y la huella de su talante en el Centro de Iniciativas y Turismo (CIT), publicaba una referencia del pregón a cuya lectura había asistido. He aquí su texto:
“EL PUERTO DE LA CRUZ ha contado para las Fiestas Patronales de este año con un Pregón de "Cinco Estrellas de Gran Lujo", como corresponde en el argot turístico: Doña María Rosa Alonso, una vez más, nos ha dejado asombrados con ese verbo increíble, en el que condensa ese "archivo viviente" de sus 92 años, que Dios le conserve, desgranando, en una muy amena charla coloquial, toda esa memoria prodigiosa, sin papeles, exponiendo sus "amores" y vivencias sobre este Puerto de la Cruz, al que desde siempre ha considerado "su amante". Imposible condensar en este comentario la gran cantidad de historias, anécdotas, hechos y sucesos, sobre el Puerto y sus personajes, narrados por Doña María Rosa, con todos los detalles de nombres y fechas, amenizados con su peculiar gracia, a pie firme, como a ella le gusta hablar. Necesitaría medio periódico para el relato.
Pero sí tenemos interés en destacar cómo dedicó la última parte de su brillantísima intervención al turismo, como buena conocedora de la vocación y tradición de la Primera Ciudad Turística de Canarias y, después de referirse al señorío y esplendor de etapas pasadas, se refirió a la necesidad de concentrar esfuerzos "para superar un momento de incertidumbre y afrontar el porvenir con decidido ánimo de superación".
Pidió a los hijos del Puerto de la Cruz que no se arredraran, que lucharan, con el espíritu que les ha caracterizado para sacar adelante su pueblo, que tiene todos los elementos para que cualquier visitante se sienta cómodo y confortable. "No más cemento. Hay que mantener el paisaje, defender el verdor y todo lo que la Naturaleza ha regalado a este pueblo de hijos ilustres y, con paso firme, seguir acogiendo turistas de todas las nacionalidades, atraídos por las singulares cualidades de este destino".
Reflexiones muy atinadas y oportunas. "Cuidado con los ciclos de la historia y lo ocurrido con los monocultivos en Canarias. Ahora dependemos de una industria que debe ser cuidada y atendida por todos".
Para quienes estamos vinculados al turismo estas ideas de Doña María Rosa resultan cautivadoras e invitan a las autoridades y agentes del sector a trabajar, sin descanso, para que cristalicen los proyectos y actuaciones que revitalicen al Puerto de la Cruz, con nuevos atractivos para los mercados emisores que introducen cambios en los sistemas de elección de lugares de descanso a los que el sector debe estar muy atento.
Sugerimos al Ayuntamiento del Puerto y a su Sr. Alcalde, Don Salvador García, que la grabación de tan interesante Pregón se divulgue tanto por TV como, si es posible, en una sesión especial para que pueda ser más conocida. El Salón de Plenos que estaba totalmente lleno, aplaudió, con inusitado calor, esta magistral y cordial charla, que da principio a las Fiestas”.

Recientemente fallecida -vino a decir su último adiós, precisamente, al Puerto de la Cruz-, la valía intelectual de María Rosa, su personalidad, su figura respetada y venerada han sido glosadas con brillantez por distintos autores. De aquel verano de 2002, además de la foto de Isauro y estos testimonios rescatados, nos queda aquella vivencia ya no tan frustrante ni tan vacía.

miércoles, 15 de junio de 2011

RESISTIR ES VENCER

En abril de 2009, publicamos en este blog la entrada titulada "Resiste Fidela, resiste". Decía así:
"Fidela Velázquez es la concejala portavoz socialista en el Ayuntamiento de San Juan de la Rambla. Antes fue consejera del Cabildo Insular de Tenerife donde, con toda dignidad, defendió las posiciones de su grupo en circunstancias, además, poco gratificantes.

Docente vocacional, ejemplo de compromiso y de entrega en su respetable profesión que ejerce con toda dignidad, Fidela parece nacida para sufrir en política, a poco que se repase su trayectoria. Bien pertrechada ideológicamente, muy juiciosa en cada debate que ha afrontado, defensora de causas nobles, una firme mesura caracteriza la defensa de sus postulados y planteamientos públicos.

Pero lo mejor de Fidela Velázquez es su resistencia. No han podido con ella quienes desde posiciones de poder político han tratado de señalarla como malvada o de marginarla. Lejos de arrugarse ante las injusticias, ante los incumplimientos de normativa, ante los caprichos y abusos de poder, la portavoz socialista ha sabido no descomponerse ni desanimarse.

Como tampoco se ha arrugado ante los pretendidamente humillantes vejámenes que desde hace algún tiempo, según cuentan, viene recibiendo de una televisión local.

Fidela es una demócrata convencida y practicante. Por eso ha sabido ganarse el respeto y la estima de quienes la vemos aguantar estoicamente, en silencio, con auténtico espíritu feminista. Ante las incomprensiones y los reveses, la concejala ramblera se ha propuesto, sencillamente, llevar cordura a los plenos de su Ayuntamiento y transmitir a sus vecinos un planteamiento de sosiego tan necesario para apaciguar ánimos y desarmar a quienes insultan y denigran.

Fidela Velázquez resiste. Si la critican por defender su programa electoral, por cumplir con el mandato popular que recibió, por querer acabar con los abusos, por exponer una visión diferente de la realidad, por estar al lado de sus gentes, por soportar tantas vejaciones, por su probada honestidad… es porque reúne cualidades que el pueblo sabrá reconocer en su día. Entonces callarán los déspotas y los insensatos.
Así que resiste Fidela, resiste".
La hemos reproducido porque poco más de dos años después Fidela Velázquez es la nueva alcaldesa de San Juan de la Rambla. Se quedó a tres votos de la mayoría absoluta y por eso precisa del apoyo del único concejal del Partido Popular. Al pie de la letra cumplió con aquella célebre frase del presidente del Gobierno de la II República, Juan Negrín, "Resistir es vencer". Lo hizo: aguantó, templó, calló, mantuvo, prosiguió...
Una resistente, una vencedora. Ya es alcaldesa.

martes, 14 de junio de 2011

CURIOSA FERTILIDAD

Un leve ejercicio de memoria nos proporciona, prácticamente, la misma realidad: en Canarias, desde 1995, después de cada convocatoria electoral autonómica y hasta la constitución del Parlamento y la posterior conformación del Gobierno, hay un período de tiempo de una extraordinaria fertilidad informativa (?).
(Se explica este interrogante de duda: circulan noticias o comentarios de variables y combinaciones políticas, ententes a conveniencia, escenarios hipotéticos a medio y corto plazo, resarcimientos y nombres, muchos nombres. Si después se compara todo lo dicho y escrito con los hechos consumados y se contrasta la realidad, posiblemente nos encontraremos con un cúmulo de incumplimientos y de pronósticos desacertados).
Hasta Paulino Rivero llegó a decir, después del 22M, que había que alcanzar pronto un acuerdo "para evitar el culebrón". Si se repasa todo lo publicado, en efecto, estamos ante una sucesión de capítulos que termina desconcertando a los mismísimos afectados (En el pasado, por cierto, hay un para de sabrosas anécdotas. Una, cuando un miembro de la comisión negociadora se fue a acostar con un resultado determinado y al día siguiente, al leer un periódico, se encontró justamente con el contrario. Otra: cuando un consejero 'in pectore' participó por la mañana en Las Palmas de Gran Canaria en una reunión para definir su departamento y por la tarde, al llegar a Los Rodeos, le reciben diciendo que ya no era consejero).
El caso es que cada empresa mediática tiene sus preferencias; cada director, sus simpatías; cada redactor, sus tendencias... y entonces se va amasando un 'totum revolutum' de muy difícil comprensión. Y a lo largo de ese período, claro, el que va desde la noche electoral a la rúbrica y presentación pública de algunos acuerdos, se van acumulando y entrecruzando todos los mensajes posibles. Natural el desconcierto del lector o del oyente que, si ya andaba hastiado de la política, mucho más sigue con tantos dimes y diretes, con realidades o con invenciones, que de todo hay en la viña política canaria.
Entre el deseo interesado y las lealtades coherentes, entre las aspiraciones y "lo ideal" (no queda más remedio que entrecomillar la expresión), se van sucediendo informaciones, titulares, comentarios y posicionamientos que reflejan una curiosa fertilidad. ¿Quién dijo que la política anda a la baja?

lunes, 13 de junio de 2011

GANA SANTA CRUZ

“Gana Santa Cruz”, la última frase del discurso de investidura de José Manuel Bermúdez, nuevo alcalde de Santa Cruz de Tenerife, el aserto enfático dirigiendo la mirada a Julio Pérez, primer teniente de alcalde en virtud del pacto suscrito entre Coalición Canaria y el Partido Socialista Canario, se convertía no sólo en la asimilación de un eslogan de campaña de esta organización política sino en la rúbrica de una alianza y en el propósito que la sustancia y estimula para justificarla, como es natural, en el lugar común de la defensa de los intereses generales de la ciudadanía.

Las negociaciones debieron ser tensas y difíciles, con muchas aristas por ambas partes, inevitables circunstancias del pretérito, recelos repartidos entre personalismos y sustrato ideológico, presiones internas y externas, dudas y expectativas caracterizadas por la incertidumbre, no en vano es la primera vez que se experimenta en la capital tinerfeña una gobernabilidad de este tipo. En Coalición Canaria afrontaban un escenario completamente desconocido: partían como opción derrotada, por primera vez desde los tiempos de Manuel Hermoso. Los socialistas arrancaban con un resultado que, sin ser óptimo, brindaba una ocasión de oro para cogobernar, dicho en puridad, para tocar poder también por vez primera, sea en los términos más comunes. Mientras la ganadora de los comicios, Cristina Tavío, constataba cómo se esfumaban las posibilidades de que Mariano Rajoy colocase otra banderita en el casi insuperable mapa del poder municipal popular al no lograr una mayoría suficiente para gobernar, otras combinaciones con posibles entendimientos entre grupos que habían obtenido representación corporativa eran sinónimo de inestabilidad y de sopa de siglas que seguro no gustaban a una ciudadanía más preocupada en salir del marasmo que afecta a la capital.

Queda la impresión de que los socialistas fueron ganando progresivamente en la negociación, sortearon vericuetos y al final han obtenido una cosecha óptima: controlan las áreas centrales del Ayuntamiento sobre la base de que el programa de gobierno, a grandes rasgos, y el suyo se superponen. Y por primera vez en la historia desde 1979 -habría que remontarse a los tiempos de la II República para hallar acaso los antecedentes- asumen responsabilidades de gobierno en el ámbito municipal. Este sí que es un hecho novedoso. De la mesura y del oficio de Julio Pérez, así como del propio Bermúdez, depende ahora el buen fin de asuntos controvertidos pero, sobre todo, de la estabilidad y de la seriedad que ha de aportar para superar el desprestigio, el hastío y hasta las sombras de deterioro e ingobernabilidad que la larga estancia sembraron la monopermanencia en el gobierno municipal. Aún es pronto para hablar de ello pero este salto es para ir pensando en el futuro y la cogestión gubernamental que se inicia en este mandato será determinante.

Pero, todo a su tiempo. Porque ahora hay que poner en valor los resultados y su repercusión, sabiendo, además, que la cultura de pactos políticos va imponiéndose. Este encontrará enemigos dentro y fuera y debe superar otros enquistamientos. Mientras la ley se mantenga en vigor y la ciudadanía emita mensajes como el de Santa Cruz, entiéndanse ustedes señoras y señores, hay que cultivar y empezar a acostumbrarse a ententes que, eso sí, deben tener un norte claro como el que pareció desprenderse del aserto final de Bermúdez: Santa Cruz gana.


viernes, 10 de junio de 2011

ULTIMO DÍA

Ultimo día en el destino, gabinete de la alcaldía de Las Palmas de Gran Canaria. Punto final a tres años de intensa actividad, de aprendizaje, de tareas municipalistas realizadas desde la óptica de la gran ciudad. Culminación de otra etapa en la vida pública, interesantísima, pese a la inesperada suerte final. Limpieza, embalaje, despedidas, una nueva mudanza que agregar a las ya experimentadas en otros lugares, en otros destinos.
Palabras de gratitud y reconocimiento. Obligadas. Por el respeto dispensado, por los afectos desplegados. Por la predisposición y por la paciencia. Con nosotros se queda ese montón de cualidades que concejales, funcionarios, colaboradores, personal de otros departamentos y compañeros atesoraron para hacer más provechoso el trabajo y más llevadero el trajín cotidiano, ese que no conoce límites de horarios ni dedicación.
Y con nosotros también la relación con directores de medios de comunicación, con redactores y locutores, con cámaras y fotógrafos.
Los plenos, los actos de entrega de honores y distinciones, la inauguración de la sede consistorial de Santa Ana, el consejo de ministros celebrado en la capital grancanaria, las comparecencias informativas, el desgarro tras el accidente de Barajas, las negociaciones, el Carnaval desde dentro, las visitas de autoridades, las relaciones interinstitucionales, los informes de última hora, la primera criba en Madrid para ser Capital Europea de la Cultura 2016…
Son unas cuantas cosas, ciertamente.
Sin lágrimas, sin resquemores... Siempre nos quedará Las Palmas.

lunes, 6 de junio de 2011

MATICES

El registro de la abstención en las pasadas elecciones autonómicas y locales iba a ser de los datos más requeridos como consecuencia de todo el proceso opinativo que las precedió. Que si corrupción galopante, que si descrédito de la clase política, que si progresiva desafección, que si desapego en aumento… Llegamos a la conclusión de que la abstención era el adversario común -especialmente en determinadas circunscripciones- y que los estados mayores de las organizaciones políticas debían esforzarse en estrategias orientadas a la motivación, emisión y captación del voto.

Con los porcentajes a la vista, en Canarias puede decirse que casi todo sigue igual o que las variaciones apenas se notaron. No ganó la abstención, pese a que la irrupción de los acampados en la segunda semana de la campaña fue un estimulante a quienes, indecisos o no, tenían la intención de no pasar por las urnas.

En la Comunidad Autónoma, la abstención se elevó al 37,30%, un 1,28% menos que en la convocatoria de 2007. Luego hay que referirse a los votos nulos y en blanco, para interpretar algunos matices. Así, se contabilizaron 22.245 votos nulos (2,36%), un 1,70% más que hace cuatro años. Y hubo 20.813 votos en blanco (2,21%), un 0,81% más que 2007.

Dando por sobreentendido que nulos y blancos no quisieron votar candidaturas, su suma es del 4,57% que, descontado el mismo concepto de los anteriores comicios, queda en 2,57% y restado del total relativo de votantes de ambas convocatorias (1,30%) hace que el incremento real de sufragios nulos y en blanco el pasado 22M haya sido del 3,27%.

Con permiso de los sociólogos y expertos en estadística electoral que deberán seguir aplicándose en análisis que justifiquen esta evolución, las fluctuaciones no son significativas, lo que tampoco debe ser admitido como un triunfo de los partidos políticos que saben de deserciones y han comprobado cómo se multiplicaban, desde muy distintos ángulos y casi a la desesperada, las apelaciones a la participación en la jornada electoral.

En cualquier caso, estos comportamientos del electorado que dejan una aritmética tan peculiar y tan respetable subrayan la doble necesidad de revisar el sistema electoral para que las proporcionalidades sean más justas o equitativas; y de robustecer una cultura de pactos políticos, inevitable para propiciar la gobernabilidad de las instituciones y proporcionar estabilidad a las mismas… porque así lo ha determinado el pueblo.
Que esa cultura choque con imponderables, desde la contraposición ideológica a las pugnas tribales y familiares, desde las ansias de poder a los deseos de revancha, desde la salvación de personalismos a la cristalización de otros intereses políticos, que choque, decíamos, es lógico e inevitable. Alcanzar la cuadratura del círculo en esta materia sí que es imposible. Sólo en la tolerancia, en la generosidad y en la visión de futuro están las claves de su madurez, decisiva, al menos, para no oscurecer aún más el horizonte.

sábado, 4 de junio de 2011

EL RETO DEL CONSORCIO


En pleno tránsito hacia el noveno mandato municipalista -con toda cordialidad: a ver si se maneja definitivamente bien ese concepto, el de mandato, y se deja de aplicar legislatura a los ciclos de los ayuntamientos- y cuando los resultados electorales del pasado 22M abrumaron la incertidumbre que pesa sobre una ciudad anquilosada, en la que predominan la inestabilidad y crispación política, en pleno tránsito, decíamos, se registra una reunión de la Junta Rectora de Consorcio para la Rehabilitación del Puerto de la Cruz que fue concebido para revitalizar un municipio en sus vertientes urbanística y turística.

A él nos hemos referido como el último tren, como la última oportunidad para salir del marasmo. La participación de las administraciones públicas y la provisión de recursos son, sobre el papel, una válvula de seguridad con la que trabajar sin demora pero con realismo, sin saltos en el vacío, sin improvisaciones, con un mínimo de planificación y con evidentes propósitos de superar aquellas trabas que se han enquistado hasta multiplicar el escepticismo y la decepción, sobre todo en la ciudadanía.

El presupuesto para el presente año asciende a ocho millones de euros. Aprobarlo en el mes de junio parece tardío pero ya conocen algunas de las circunstancias que concurren en la puesta en marcha del Consorcio. El sector turístico -siempre expectante pero que debe invertir su tradicional pasividad- también aguardaba los primeros resultados pues cualquier intento de revalorizar su oferta pasa por presentar un producto distinto, más actualizado y con innovaciones capaces de captar segmentos de mercado.

La Junta Rectora del Consorcio, según informaciones periodísticas, aprobó quince propuestas de actuaciones a ejecutar en lo que resta de año, entre las que se encuentran la rehabilitación y acondicionamiento del castillo San Felipe y su entorno; la regeneración y mejora del paseo de Los Cipreses y nuevo mirador de La Paz; la remodelación del parque San Francisco; el complejo deportivo de San Felipe; la declaración de Bien de Interés Cultural (BIC) de la Casa Amarilla con la calificación para uso dotacional del sitio histórico y su entorno y reconstrucción del inmueble; la ordenación urbanística pormenorizada del ámbito del parque marítimo; el desarrollo de la estación de guaguas; los aparcamientos subterráneos en la plaza de la Constitución y Punta Brava; el reacondicionamiento de la carretera del Este y mejora del paseo San Telmo, entre otras.

Como es fácil comprobar, de muchas de estas actuaciones se viene hablando desde hace años. De ahí que, al comprobar los escasos avances, la gente haya aumentado su escepticismo. Demasiada lentitud. Es verdad que el Puerto de la Cruz, históricamente y salvo excepciones, como Playa Jardín, no ha tenido mucha suerte con las obras públicas pero eso tiene que empezar a dejarse de ser una mera disculpa. Sólo el tesón y la continuidad posibilitarán la culminación de aquellas iniciativas orientadas a una nueva realidad urbana y a un enriquecimiento del producto turístico. Se trata de hacerlo más competitivo.

El Consorcio, por otro lado, tiene que funcionar con recíproca lealtad de las administraciones cuyos representantes se sientan en su mesa. Hay que expresarlo en términos de deseo: ojalá que las diferencias políticas no sean un obstáculo. Está en juego la supervivencia de un destino turístico. Tiene mucho trabajo y es todo un reto el que está planteado para sus responsables, luego se trata de que la población perciba la eficacia y que es factible, sí, el principio de cooperación interadministrativa.

Quienes lo hemos defendido desde hace años, sin que hubiera muchos respaldos por cierto, ahora sólo tendremos que congratularnos al palpar los resultados.



jueves, 2 de junio de 2011

ITALIA, FIN DE CICLO

A Berlusconi también le han castigado los electores, por resumir en el adverbio de modo las similitudes que pueden encontrarse con el revés sufrido por el socialismo español, interpretado, no sólo por analistas sino por numerosos militantes, como una respuesta desfavorable a las medidas contracrisis puestas en marcha por José Luis Rodríguez Zapatero. Otros gobernantes de la Unión Europea, incluidos Sarkozy y Merkel, recibieron también varapalos electorales en elecciones regionales o cantonales.
Pero en el caso del primer ministro italiano concurren otras circunstancias. Quizá el pueblo italiano, tan tolerante, tan permisivo, se haya cansado de un comportamiento impropio de un gobernante proclive a los escándalos que ha ido timoneando en medio de un progresivo desprestigio y ante una creciente pérdida de credibilidad.
Cierto que las peculiaridades de la política italiana proporcionan unos tintes grotescos a los que nos hemos acostumbrado desde hace años pero… todo tiene un límite y ese es el que los electores acaban de poner a Silvio Berlusconi, derrotado con estrépito en Milán y Nápoles. Un auténtico descalabro de imprevisibles consecuencias pues sabidas son las dificultades de relación personal y política con el jefe de la Liga Norte, Umberto Bossi, su aliado político y el más firme sostén cuando han arreciado las sucesivas crisis que envuelven a Il Cavaliere.
El desgaste de Berlusconi es notable. Ni sus delirantes afirmaciones sobre el triunfo de la coalición centroizquierdista ni las predicciones catastrofistas amainaron el descontento ciudadano. Los electores de importantes ciudades italianas se han cansado, han dicho basta y su pronunciamiento cabe interpretarlo no sólo como un castigo sino como un fin de ciclo.
Eso sí: fin de ciclo a la italiana.

miércoles, 1 de junio de 2011

LUCES ROJAS

“Hay muchas luces rojas de racismo y xenofobia encendidas en Europa”, ha declarado en Las Palmas de Gran Canaria Alvaro Gil Robles, ex defensor del Pueblo y ex Comisario de derechos Humanos del Consejo Europeo. O sea, se constata que la incertidumbre se acrecienta y que la inquietud se agrava: cuando observadores con experiencia como Gil Robles hacen estas afirmaciones es que los temores, con los brotes consagrados en las urnas de distintos países, son fundamentados.
¿Corre peligro Europa? Pues aunque la pregunta parezca bruta o exagerada, hay elementos suficientes para una respuesta afirmativa. Entre esos elementos, la falta de un liderazgo potente y respetable (no personal sino el que correspondería a la Comisión Europea) que frene los movimientos unilaterales de países que cuyos gobiernos buscan respuestas para salvarse sin reparar en que ponen en peligro la unidad y los cimientos mismos de la Unión Europea.
El propio Gil Robles habla de un progresivo debilitamiento de la Europa económica, política y social lo que, en esencia, significa que han entrado en crisis los grandes valores colectivos democráticos de la construcción europea.
En Austria, Holanda, Dinamarca, Finlandia, en la Francia lepenista o la Italia permisiva donde resurgen ciertas actitudes autoritarias, se encienden esas luces anunciadoras de fenómenos sociales que cuestionan no ya el espíritu europeísta sino las bases mismas de la convivencia.
Agresividad, incitación a la violencia, radicalización… Todo eso -he ahí lo preocupante- por la legitimidad de las urnas.
No echemos en saco roto apreciaciones como éstas pues formamos parte de la Unión y esta vez no caben posturas complacientes de verlas venir, de descansar responsabilidades en terceros y ya nos alinearemos.
Las luces rojas advierten. Y hay que posicionarse.