sábado, 19 de noviembre de 2016

DOS MIL Y UNA ENTRADAS

El periodismo no es cuestión de cantidades, que también, pero cuando se registran ciertas cifras es inevitable echar la vista atrás y reflexionar. El 31 de agosto de 2007 iniciábamos la edición de este blog. Fuimos de los primeros en Canarias en utilizar esta opción surgida de las nuevas tecnologías y de los nuevos soportes para comunicar. Llegar a dos mil entradas no es, en sí mismo, un logro sino una manera de acreditar que la vocación está latente, que es capaz de generar una autodisciplina para cumplir y para actualizar el canal de expresión prácticamente a diario.

El ideario de la cabecera está vigente: “...fruto del propósito de contar cosas y comunicar, de seguir ejerciendo el oficio, de estar en contacto con la gente”. En la fecha citada, andábamos por la Delegación del Gobierno en Canarias y ya habíamos abandonado el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz. En la vida se van sucediendo las etapas, algunas bien definidas. Éramos consecuentes: el periodismo, la comunicación, eran (son) la vocación, convertida en ejercicio profesional que ha alternado durante mucho tiempo con ocupaciones en el ámbito público. Creemos haber respetado las fronteras; sabíamos dónde estaban luego se trataba de no entremezclar ni de abandonarse a senderos de aprovechamiento personal o de representatividad. Hasta aquí: las dos mil entradas del blog -que esperamos sean muchas más- así lo reflejan, no siendo la única fuente que nutre aquel ejercicio.

Gracias a los seguidores, a los pacientes lectores, a los críticos y a los que nos han transmitido felicitaciones. Todo esto sirve como estimulante del oficio, que nos apasiona. Nos sigue interesando su evolución, estamos muy atentos a las innovaciones, a las aportaciones, a las opiniones bien fundamentadas, a los resultados de las investigaciones, al nuevo modelo de negocio, a las inquietudes y sensibilidades de los estudiantes, a los dramas personales de quienes pierden su puesto de trabajo... Esta es una vocación contrastada a base de aprendizaje permanente y de humildad en el quehacer. Ser autodidacta para esmerarse y para enriquecer la condición de obrero de la comunicación que es, definitiva, lo que somos o parecemos ser.

Al cabo de dos mil entradas, que versan sobre muy distintas materias, nos anima seguir en contacto con la gente, ser constructivos. La doble intención de hacer un periodismo crítico y amable a la vez, respetuoso y tolerante al mismo tiempo, está de forma constante en el pensamiento y en su traducción. Para bien o para mal, este fue el camino que escogimos. Hay que recorrerlo con dignidad, soportando intemperancias y hasta insolencias, superando obstáculos y levantándose tras los imponderables.


Nadie dijo que iba a ser un trayecto sencillo. 

2 comentarios:

Jesús Hernández dijo...

Enhorabuena, Salvador. Son muchos los que comienzan un blog, pero mantenerlo durante tantos años y con tanta constancia, solo está al alcance de los profesionales y de los que aman lo que hacen. En tu caso, y en este blog, se conjugan de manera mágica ambas cualidades.

Esperamos, al menos, otras dos mil entradas.

Un abrazo y reiterar mi felicitación.

Seguimos leyéndote.

Gustavo Armas dijo...

Admirado García:
La constancia, el pundonor, la honra personal tratar tus temas con claridad, sin poner en duda tu palabra, hacen de tu trabajo, tanto cibernético como analógico digno de toda admiración.
Te sigo y te seguiré...
Un abrazo
Gusrtavo Armas