En
el Ayuntamiento del Puerto de la Cruz deberían estudiar y hacer un
seguimiento de una decisión del Ayuntamiento de Murcia en virtud de
la cual una empresa constructora se encargará de llevar a cabo las
ejecuciones subsidiarias de obras, restablecimiento de la legalidad
urbanística, limpieza y/o vallado de solares y cumplimiento del
deber de conservación en virtud de actos propios de la concejalía
de Urbanismo, Medio Ambiente y Huerta.
La
iniciativa sería de aplicación en otros muchos consistorios, pero
nos centramos en el portuense teniendo en cuenta las circunstancias
que concurren en la geografía del municipio. Ya saben que hay una
queja muy extendida de falta de mantenimiento y de las estampas de
abandono prolongado que caracterizan algunos puntos de la ciudad, sin
que haya visos -por las razones que sea- de que se produzca un cambio
a corto o medio plazo.
Se
trata, en teoría, de una intervención muy interesante. Luego
vendrán los peros y los inconvenientes, principalmente de tipo
económico, pero que es un cauce de solución para situaciones que se
eternizan, seguro.
Veamos.
Pongamos que hay un solar o un inmueble abandonado, expuesto a
deterioro sin límite, a vertedero y a ser 'okupado'. En aquellos
supuestos que la propiedad del suelo o la edificación incumpla los
deberes de conservación o protección de los bienes en las
condiciones de higiene, seguridad y mínimo ornato exigibles, el
Ayuntamiento, cumplidos los trámites de requerimiento, intervendrá
con arreglo a los términos establecidos en los pliegos de licitación
del concurso.
Es
decir: una vez acreditado que el terreno o el inmueble acumulen
suciedad o presenten riesgos para la salud y convivencia de las
personas, el departamento correspondiente del Ayuntamiento -suele ser
Urbanismo- trasladará una orden de intervención a los propietarios.
En caso de que se cumpla el plazo estipulado y no actúen, lo hará
la empresa contratada por dicho departamento, de forma subsidiaria y
a costa del títular.
Los
resultados en Murcia durante 2016 son muy estimables: fueron
registradas 415 órdenes de limpieza de solares, 23 actuaciones de
ruina inminente, 15 comunicaciones para la instalación de lonas con
serigrafía de la fachada y 171 por asuntos varios, principalmente
actuaciones en fachadas por motivos de seguridad, derivados de
desprendimientos, desconches, desperfectos o similares. Si se repasa
la naturaleza de estas situaciones, deducirán fácilmente por qué
sugerimos la aplicación de la determinación murciana en el
municipio portuense: es homologable.
Es
cuestión de proponérselo. Y de ejecutarlo. Con ello se crea
conciencia de conservación y mantenimiento. Si se quiere mejorar la
realidad urbanística, si se quiere que algunos núcleos urbanos
presente un aspecto más gratificante, más atractivo y menos
abandonado, este pudiera ser un buen instrumento. El conjunto
patrimonial saldría ganando. Y el interés privado, también: se
revalorizaría, no tengan duda. Reactivación de la economía local y
probable creación de empleo, efectos añadidos.
Cuestión
de proponérselo. Y de ejecutarlo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario