martes, 25 de diciembre de 2018

UN DÍA COMO HOY...

¿Quién nos leerá un día como hoy?

La lotería pasó de largo pero los villancicos suenan a todas horas, en la casa, en la calle... Grupos de Lo Divino, se escribía entonces. Bueno, hasta no hace mucho. Se palpa el consumismo, contagiados los niños.

Este año, la característica fue el anticipo: todos querían adelantar. Antes el alumbrado, antes la distribución de regalos, antes las colas,antes las llamadas de felicitación, antes la compra de regalos, antes la comida especial. El discurso del rey, eso sí, se mantiene a su hora. Cada cosa, en su cajita, que decía Gilberto.
Adeste fideles o Venite adoremus Dominum.
El recuerdo de quienes ya no están.
Contigo en la distancia, para acabar de entristecer. Eterno César Portillo de la Luz.

Libros leídos, presentaciones, cuadros, arte, gestiones, entradas, logros, sinsabores, documentos archivados... un año que se agota y la memoria que se resiste a flaquear. Ya puedes ir haciendo balance. ¿Total, para qué? Analíticas, retinopatía, hipertensión, desabrido, sin azúcar, descafeinado... Y los papeles amontonados, desordenados. Todo se va perdiendo, ¿entienden?
¿Quién nos leerá un día como hoy?

El valor de un beso, el contacto del abrazo, la mirada cruzada... ¿Qué fue de todo eso?
Menos mal que la longevidad es gratificante y la sangre de los menudos alegra ánimos y corazones.
Pero no es cuestión de amargar más ni de amargarse, que la vida aún puede deparar anhelos satisfechos. Solo es cuestión de proponérselo. Hay personas que aún esperan siquiera un gesto, una oportunidad, una determinación...

Pero ¿quién nos leerá un día como hoy?


1 comentario:

Unknown dijo...

El futuro de cualquier pais sea pobre o Rico, esta en la infancia El problema no se educar, esta en reeducar, Y yo me pregunto? Quien se compromete o implica en ello? Feliz vida